Las dos horas y media de pleno sirvieron para descubrir a la fulgurante estrella nacionalista que ilumina, metafóricamente hablando, a la ciudad y la teoría de las traineras que defiende el PP. Asimismo, hubo espacio para un amago de invitación de los populares al BNG para hacer fuerza y aprobar juntos un presupuesto de verdad.
Aunque sin grandes alardes amorosos, los ediles de la Corporación ourensana que tomaron la palabra ayer en el pleno se vieron, de alguna forma, embargados por el espíritu de San Valentín. De otro modo, sería difícil explicar la curiosa miscelánea de metáforas que animaron una sesión que se prolongó durante más de dos horas y media.
Sorprendente fue, sin duda, la apreciación de Alexandre Sánchez Vidal, que después de valorar los presupuestos desde la óptica dos primeiros que un nacionalista debate no goberno municipal, manifestó que la estrella roja de cinco puntas, símbolo del BNG, tense convertido nunha sopernova que enche de luz e materia á cidade. Ante tremenda perla, el showman de las sesiones plenarias municipales, el popular Francisco Javier Rodríguez Nóvoa, se preguntó en voz alta se co estoupido da estrela do Bloque quedaron cegos o alcalde e o concelleiro de Facenda. Y así se produjeron las primeras risas del pleno, que animaron a Rodríguez Nóvoa a exponer su teoría sobre el bipartito: la de la trainera vasca. Según el portavoz eventual del PP, en esta barca deportiva que para él simboliza al Concello, el timonel está en las pavías, los remeros socialistas están ausentes y los del BNG se dedican a remar en círculos sin avanzar hacia ningún lado.
Las tías de la herencia
Y ante tanta mención por parte de PSOE y BNG a la herdanza recibida del anterior gobierno, Rodríguez Nóvoa volvió a tirar de alegoría para manifestar que a ustedes les toca heredar de la tía del PP, que no será simpática pero al menos tiene dinero en la cuenta, en referencia al ahorro neto del Concello, pero cuando nos toca heredar a nosotros, siempre tenemos que aguantarnos con la tía rácana del PSOE, que no deja ni un duro, aludiendo a la situación tantas veces mencionada por los populares de cuando alcanzaron el gobierno municipal en 1995 y aventurando lo que auguran conseguir de aquí a tres años.
Entre metáforas y símiles, Rodríguez Nóvoa también tuvo tiempo para ejercer de oráculo en lo que respecta al Pabellón de Deportes. Vislumbra así que si están previstos 100.000 euros en concepto de abonos, ni metiendo a todos los militantes del BNG en la provincia se lograrían alcanzar, solidarizándose con el edil de Deportes, el nacionalista Fernando Varela, confesándole que si yo fuera él, me pondría a temblar.
Como todo buen showman que se precie, los gestos y la voz (sobre todo su volumen) acompañaban al discurso, que a medida que iba calentando al personal, crecía en chascarrillos: Me encanta la idea de la policía de barrio, así podrán ir por las afueras poniendo multas a los ciudadanos para conseguir recaudar lo que prevén, aseveró. Y hasta tuvo tiempo para inusuales invitaciones al BNG: Sólo nos hace falta un voto, sólo uno, para aprobar unos presupuestos de verdad. Anímense (mirando fijamente a Sánchez Vidal). Pero nadie se animó.
Sorprendente fue, sin duda, la apreciación de Alexandre Sánchez Vidal, que después de valorar los presupuestos desde la óptica dos primeiros que un nacionalista debate no goberno municipal, manifestó que la estrella roja de cinco puntas, símbolo del BNG, tense convertido nunha sopernova que enche de luz e materia á cidade. Ante tremenda perla, el showman de las sesiones plenarias municipales, el popular Francisco Javier Rodríguez Nóvoa, se preguntó en voz alta se co estoupido da estrela do Bloque quedaron cegos o alcalde e o concelleiro de Facenda. Y así se produjeron las primeras risas del pleno, que animaron a Rodríguez Nóvoa a exponer su teoría sobre el bipartito: la de la trainera vasca. Según el portavoz eventual del PP, en esta barca deportiva que para él simboliza al Concello, el timonel está en las pavías, los remeros socialistas están ausentes y los del BNG se dedican a remar en círculos sin avanzar hacia ningún lado.
Las tías de la herencia
Y ante tanta mención por parte de PSOE y BNG a la herdanza recibida del anterior gobierno, Rodríguez Nóvoa volvió a tirar de alegoría para manifestar que a ustedes les toca heredar de la tía del PP, que no será simpática pero al menos tiene dinero en la cuenta, en referencia al ahorro neto del Concello, pero cuando nos toca heredar a nosotros, siempre tenemos que aguantarnos con la tía rácana del PSOE, que no deja ni un duro, aludiendo a la situación tantas veces mencionada por los populares de cuando alcanzaron el gobierno municipal en 1995 y aventurando lo que auguran conseguir de aquí a tres años.
Entre metáforas y símiles, Rodríguez Nóvoa también tuvo tiempo para ejercer de oráculo en lo que respecta al Pabellón de Deportes. Vislumbra así que si están previstos 100.000 euros en concepto de abonos, ni metiendo a todos los militantes del BNG en la provincia se lograrían alcanzar, solidarizándose con el edil de Deportes, el nacionalista Fernando Varela, confesándole que si yo fuera él, me pondría a temblar.
Como todo buen showman que se precie, los gestos y la voz (sobre todo su volumen) acompañaban al discurso, que a medida que iba calentando al personal, crecía en chascarrillos: Me encanta la idea de la policía de barrio, así podrán ir por las afueras poniendo multas a los ciudadanos para conseguir recaudar lo que prevén, aseveró. Y hasta tuvo tiempo para inusuales invitaciones al BNG: Sólo nos hace falta un voto, sólo uno, para aprobar unos presupuestos de verdad. Anímense (mirando fijamente a Sánchez Vidal). Pero nadie se animó.
