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El PP, dispuesto a gobernar la Diputación solo o con un pacto

Un vecino de la ciudad vota en el Marcos Valcárcel.
photo_camera Un vecino de la ciudad vota en el Marcos Valcárcel (JOSÉ PAZ).

Ciudadanos, "abierto a escuchar" a la espera de que se confirme la pérdida de la mayoría absoluta

A diferencia de las anteriores elecciones locales, Ourense se asoma en esta ocasión a un escenario desconocido en la Diputación, en la que por primera vez el PP apunta a quedarse sin la mayoría absoluta, aunque la distribución de los escaños todavía no está confirmada debido a un problema en el escrutinio de dos mesas en la ciudad de Ourense, en el que se han registrado incidencias que no han permitido volcar el resultado definitivo.

Por este motivo, y a la espera del recuento definitivo de mañana miércoles, los dirigentes de todas las formaciones mantienen la cautela sobre si el PP contará con 12 0 13 diputados en la próxima corporación, distribuyéndose el resto entre ocho o nueve para el PSOE, dos para DO y uno para BNG y Ciudadanos.

Con todo, la hipótesis que se maneja tanto en las filas populares como socialistas es que finalmente el partido liderado por Manuel Baltar dependa de otras formaciones para seguir al frente de la institución, algo que reconocía este lunes el propio presidente del partido, apuntando que, dada su condición de fuerza más votada, estaría en disposición de gobernar, bien en minoría "ou intentando falar con alguén co que teñamos programas en común", dice Baltar, que no descarta a ningún partido.

En este punto, es Ciudadanos el que emerge como potencial aliado para el PP, dado que ambas formaciones ya han suscrito pactos como en Andalucía y se preparan para ello en comunidades como Madrid. El secretario de organización del partido naranja, Laureano Bermejo, no cerraba este lunes las puertas a nada.

"Aunque es demasiado prematuro hablar de un posible acuerdo en la institución provincial y hay que esperar un poquito más, Ciudadanos va a pactar con políticas, no con políticos", destacó Bermejo, garantizando que "no habrá líneas rojas".


Cuatripartito


Una visión muy distinta manejan en el seno del PSOE ourensano, que empezará desde ya a mover ficha para tantar una posible alternativa al gobierno del PP en la institución provincial. "Queremos dar futuro a esta terra, todas as forzas deben facer as oportunas reflexións para determinar se a provincia debe xirar cara á extinción, ou cara un novo tempo político que dea esperanza", dijo el socialista Juan Carlos Francisco.

Sin embargo, cualquier mayoría alternativa a la del PP requeriría de un acuerdo a cuatro bandas entre PSOE, DO, BNG y Ciudadanos. El secretario xeral del PSdeG, Gonzalo Caballero, ya ha anunciado que su formación liderará los contactos, apuntando que conseguir una alternativa "sería bueno para Ourense y Galicia".

Desde el BNG, Luis Seara garantiza que su partido no pondrá obstáculos, mientras que en DO se reservan sus planes por el momento.


Único gobierno provincial al alcance popular


Tras ceder en 2015 las diputaciones de A Coruña y Pontevedra por el empuje del PSOE y las mareas, la institución ourensana se había quedado hace cuatro años como el último feudo provincial para el PP, que tras los recientes comicios del domingo ve como peligra su único bastión, dado que el escrutinio ha confirmado los gobiernos en coalición entre PSOE y BNG en las otras tres diputaciones.

El retroceso en los núcleos urbanos se está convirtiendo en una losa para el PP, que sigue manteniendo su hegemonía en buena parte del rural, como demuestra con sus 64 victorias en la provincia ourensana.

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