Después de que la Universidade de Vigo hubiera recibido esta semana la dura noticia de su caída, un año después de su ascenso, del ránking de Shanghái y fuese la única española en desaparecer de la lista de las 500 mejores universidades del mundo, desde el Rectorado, a la espera de recibir el informe completo, no ocultaron su preocupación por los resultados del informe. No obstante, un portavoz del rector Salustiano Mato reconoció que desde la Universidade de Vigo se veía esta caída como algo previsible dadas las circunstancias.
Y es que las reducciones del presupuesto destinado al I+D+i son para el Rectorado una de las principales causas de esta pérdida de prestigio internacional. 'Aguantar era muy difícil y duro', explica el portavoz, quien recalcó que el documento completo del estudio todavía no está en poder de la Universidade, y que será necesario realizar un estudio a fondo de los nuevos indicadores del ránking, dado que las autoridades académicas chinas han cambiado los parámetros de calificación respecto al año anterior. 'Ya contábamos con ello, Mato ya avanzó que era poco probable seguir', añade.
Una vez se reciba el informe, será misión del exrector Domingo Docampo la de analizar de manera exhaustiva los criterios en que se basaron los autores del ránking y determinar las causas de la caída para tratar de encontrar soluciones futuras.
No obstante, desde el Rectorado quisieron reconocer el mérito de la Universidade de Vigo de haber sido 'quizá la más joven de Europa en entrar en el ránking' en su día, y defiende que se trata de una universidad pública y pequeña, caracterizada por la investigación y la transferencia a las empresas. 'Además, -recuerdan las mismas fuentes- la Universidad de Santiago, con 500 años de historia, ya no está en este ránking'.
Una vez se reciba el informe, será misión del exrector Domingo Docampo la de analizar de manera exhaustiva los criterios en que se basaron los autores del ránking y determinar las causas de la caída para tratar de encontrar soluciones futuras.
No obstante, desde el Rectorado quisieron reconocer el mérito de la Universidade de Vigo de haber sido 'quizá la más joven de Europa en entrar en el ránking' en su día, y defiende que se trata de una universidad pública y pequeña, caracterizada por la investigación y la transferencia a las empresas. 'Además, -recuerdan las mismas fuentes- la Universidad de Santiago, con 500 años de historia, ya no está en este ránking'.
