Promotores del polígono urbanístico donde se ubica iniciaron la urbanización del entorno de la infraestructura, pero reclaman la fianza depositada por la concesionaria para contribuir al coste
Los trabajos de urbanización, en estos momentos a pleno rendimiento, en el polígono urbanístico de As Lagoas SU-25 (Api-02 del Plan de 2003) podría facilitar la apertura, para el próximo curso universitario, de la residencia de estudiantes, cerrada en el periodo lectivo actual por orden judicial, al no estar urbanizado su entorno. Las obras, emprendidas por los promotores y propietarios del polígono, un espacio de 26.000 metros cuadrados situados en frente del Edificio Politécnico, en las antiguas naves de Rogelio Fernández, tienen un presupuesto de dos millones de euros e incluyen la urbanización del terreno que rodea la residencia universitaria, aunque los miembros de la junta de compensación ya advirtieron su disposición a acudir a los tribunales si no reciben los 162.000 euros que la empresa gestora de la residencia, Siresa Noroeste, depositó como fianza en el Concello cuando se construyó el edificio. En ese contexto, el abogado de la junta, Antonio Feijóo Miranda, ya aseguró que sus defendidos exigirán por todos los medios a la Universidad de Vigo y al Concello de Ourense el pago de la totalidad de las obras de urbanización correspondientes a la residencia, con cargo a esos 162.000 euros. Lo han planteado ya por escrito pero, de momento, no han obtenido respuesta; dice que el actual gobierno municipal, que sí ha reconocido que recibió la solicitud de esos fondos para la obra, "mantiene la petición desde hace siete meses en el despacho del asesor jurídico sin darle curso ni respuesta".
Además, los propietarios del suelo han pedido al Concello el convenio con la Universidad por el que ésta se hizo con los terrenos de Casas Orense, la promotora que lidera la urbanización del polígono, a cambio de comprometerse a costear la urbanización del entorno de la residencia; un acuerdo éste que data ya de 1998 y que pactaron el Concello y la institución universitaria.
Aseguran en la junta de compensación que nunca renunciarán a sus derechos de urbanizar y edificar en este espacio de 26.000 metros cuadrados, al tiempo que esperan que un nuevo mandato municipal permita resolver la discrepancia actual entre junta y Concello.
