El Concello desestima su petición de daños y perjuicios en base a un informe técnico que indica que no probó con "rigurosidad" el incidente
El gobierno municipal acordó en su reunión de ayer desestimar la petición de responsabilidad patrimonial planteada por los responsables de una tapería del casco antiguo de la ciudad que, dice, se vieron obligados a cerrar el establecimiento durante el rodaje de la película "A esmorga" en su calle, en concreto la rúa Lepanto. Según estos responsables, la productora de la película llenó su fachada de cables y focos, les mandaron cerrar las contraventanas, después les pidieron que apagaran el extractor de la cocina y, finalmente, les instaron a guardar silencio porque las conversaciones en el interior del local interferían en la filmación, lo mismo que el ruido de la campana extractora. Y todo ello, dicen, sin ser avisados previamente por el Concello, al que consideran responsable civil subsidiario, del montaje que se iba a producir en la calle.
Se trata del negocio hostelero "Porta norte", que en una instancia dirigida al Concello reclamó daños y perjuicios por valor de 500 euros, que el gobierno local descarta abonarle porque el informe del jefe de servicio correspondiente entiende que no ha lugar, ya que no está suficientemente probado el incidente. Este informe indica que los hechos que dan lugar a indemnizaciones deben estar "demostrados por unha proba rigurosa que acredite a realidade do dano ou perxuizo", pero en este caso, señala, la Policía Local no tuvo conocimiento de la incidencia y tampoco existe un parte de la empresa productora admitiendo el cese de actividad; y no se aporta, precisa, testimonio alguno.
Por ello, concluye, tras analizar el escrito de reclamación y las alegaciones presentadas por la productora del filme, Vía Láctea, a la que representó en este caso el director de la película, Ignacio Vilar, que no cabe aceptar la reclamación de daños y perjuicios puesto que los reclamantes no probaron "a realidade do dano en unha relación exclusiva do funcionamento dun servizo público; e que de producirse danos xustificados, o responsable sería a empresa productora do filme, segundo se deixa constancia no convenio", el que firmaron el Concello y Vía Láctea para el rodaje de la película.
El incidente denunciado se produjo el 19 de febrero del año pasado a partir de las siete y media de la tarde, cuando al intentar abrir el local vieron que estaba la calle acordonada, lo que inicialmente les impidió el acceso. Tras entrar, todo fueron obstáculos, aseguran, para gestionar el negocio, declinando los de la productora la responsabilidad en el Concello, asegura uno de los responsables del local.
Ignacio Vilar alegó que el corte de la calle fue intermitente y no superó los 10 minutos pues el tiempo efectivo de rodaje fue de dos, negando que "Porta norte" se viese abocado al cierre esa noche. Además, precisa que ningún otro local de la cal de la calle (que forma parte de la zona de vinos) presentó quejas, permaneciendo todos abiertos y sin interrumpirse el acceso a los clientes.
