La Xunta de Galicia quiere 30.000 retornados en tres años

Alfonso Rueda y Antonio Rodríguez Miranda entregan las distinciones a sociedades gallegas.
photo_camera Alfonso Rueda y Antonio Rodríguez Miranda entregan las distinciones a sociedades gallegas.
Rueda invita a volver a la “illa de sentidiño” gallega a los emigrantes: “Teñen todo o dereito”

La Xunta de Galicia se marca como reto que retornen 30.000 emigrados en tres años. Así lo expresó el presidente autonómico, Alfonso Rueda, en la inauguración oficial del XIII pleno del Consello das Comunidades Galegas, un órgano de representación permanente de la colectividad gallega que reside fuera de la comunidad, y que reúne en Ourense a 80 entidades de 13 países.  “Galicia é e seguirá sendo unha illa de sentidiño” dentro de España y su “incerta” situación actual, presumió Rueda al abrir el Consello en el que garantizó el apoyo  a los gallegos en el exterior que decidan volver a Galicia, al tiempo que ratificó como objetivo conseguir en 2026 el retorno de 30.000 personas con ayuda de la Administración autonómica, que se sumarían a los 28.000 que ya han podido regresar desde 2018: “Teñen o dereito a vivir aquí”.

En su intervención en el paraninfo del IES Otero Pedrayo, tanto Rueda como el secretario xeral de Emigración, Antonio Rodríguez Miranda, hicieron entrega de una distinción a 19 entidades que llevan más de cien años en activo. Tras este gesto, Rueda agradeció la “importante labor mantendo un recuncho de Galicia en cada lugar del planeta” y destacó que Galicia es “pioneira” en materia de retorno,  con la actual Estratexia Galicia Retorna 2023-2026. 

“Queremos que axuden a construír a Galicia do futuro”, manifestó el presidente de la Xunta, quien durante su intervención también destacó las medidas de apoyo del Gobierno autonómico a los gallegos que siguen viviendo en el exterior con sus familias, unas ayudas “imprescindibles” que tratan “de devolver só un pouco do que nos deron”. 

Por parte de la Diputación  de Ourense, el presidente provincial, Luis Menor, valoró este acto como “un fito importante” para Galicia, pero también en concreto para la provincia de Ourense, que “foi berce da emigración” y es un territorio que “pode ofrecer aos emigrantes retornados grandes oportunidades dado o déficit de traballo que existe en diversos eidos”.

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