La polémica sobre el servicio de UCI móvil del Hospital Público Valdeorras fue retomada ayer por el PSdeG-PSOE valdeorrés. El senador Miguel Bautista, los alcaldes de O Barco y Vilamartín, junto con concejales barquenses de A Rúa y O Bolo reclamaron ayer un servicio que antes mereció las críticas de la CIG y de varios médicos de Urxencias. El Sergas insistió en que “o distrito sanitario de Valdeorras ten garantizado o transporte medicalizado urxente (UVI Móbil)”.
Las críticas surgieron después de que una paciente con un shock anafiláctico tuviese que esperar más de cinco horas para que llegase la UVI móvil enviada desde Ourense para trasladarla al hospital de la capital, según apuntó el concelleiro socialista barquense Aurentino Alonso.
La espera de cinco horas de una paciente con shock anafiláctico para ser trasladada causó la nueva polémica
El edil también aludió al viaje a la ciudad emprendido por una ambulancia normal y sin médico acompañante, que fue reemplazada a mitad de camino por una UVI, esta con facultativo, enviada desde la capitalidad provincial. Además, se quejó del traslado de dos pacientes en un mismo vehículo sanitario o al regreso a O Barco de otro cuando llevaba un paciente para recoger a un segundo.
“Os valdeorreses non somos cidadáns de segunda”, dijo Aurentino Alonso. “El personal sanitario tiene un estrés progresivo y corremos peligro de tener una desgracia”, añadió el concejal de Sanidad barquense, Orlando Saavedra.
Explicó que ambulancias sí hay en el Hospital y que el problema “parece que es de negociación con los médicos que realizaban los traslados. La Xunta debe negociar, porque hay médicos en Valdeorras dispuestos a asumirlos”. Finalizó señalando que “el responsable de la gestión sanitaria es la Xunta”.
Aurentino Alonso, en la protesta socialista frente al Hospital de Valdeorras. // (Isaac Cruz)
El Sergas responde que el servicio está garantizado
Desde el Sergas explicaron que el traslado demorado cinco horas fue por el “criterio da especialista responsable da paciente, que considerou non cumpría criterios de urxencia pero si de vixilancia médica para maior seguridade”. Añadió que “permaneceu en observación do Servicio de urxencias e xa foi dada de alta a domicilio”.
El Sergas asegura que “Valdeorras ten garantido o persoal médico ou de enfermería necesario para acompañar a un paciente cando o seu estado o requira, é dicir, dispón de profesionais que garantizan un transporte medicalizado ou de vixilancia intensiva (UVI móbil)”.
Desde el Servicio Galego de Saúde recordaron que, este año, la plantilla de enfermería fue ampliada con dos profesionales específicas para acompañar estos viajes, tras dejar de cubrirlos las profesionales que los hacían voluntariamente y de forma retribuida.
Respecto a los médicos que tomaron esta misma decisión, apuntó que, “para garantir a dispoñibilidade de persoal médico para os transportes, contase coa colaboración de facultativos do resto da área sanitaria e co soporte do 061”.
