Numerosos amantes de la música folk y de las danzas más tradicionales se dieron cita en la primera jornada del Laroucofest, celebrado en Baltar y organizado por la Asociación de Mulleres Rurais A Raia.
Laroucofesteiros y laroucofesteiras. Así se hacen llamar los que no quieren perderse detalle de la primera edición del festival "Laroucofest", organizado por la Asociación de Mulleres Rurais A Raia.
El cometido está claro: un evento en el que se pretende fusionar tradición y diversidad cultural, con la música folk y la danza tradicional como nexo de unión. Y así fue durante la jornada de ayer. El programa dio comienzo a las 16,00 horas, bajo un sol abrasador, pero no impedidor. Y no pudo ser de una manera más cercana al público. Las tabernas de Baltar, lugar donde se celebra el festival, abrieron sus puertas para recibir los tradicionales "cantos de Taberna", que dieron la bienvenida y animaron a la fiesta.
Llegada la hora de la merienda, la zona de "O Caneiro", en una de las márgenes del río, fue testigo, y dio cabida a todo el que quiso serlo, de la gran foliada, en la que participaron numerosos grupos de los alrededores. Muiñeiras, jotas, vals, pasodobles y rumbas fueron las melodías más sonadas, aprovechadas por los asistentes, que no perdieron ritmo en ningún momento.
A los que les quedó el "gusanillo" en el cuerpo para más baile, en especial los que de nuestro folclore no tienen mucha práctica, les llegó su hora. Un maestro profesional estuvo durante hora y media enseñando los pasos más básicos en un taller muy concurrido. Una actividad que dio paso a la cena campestre, en la zona habilitada para tal y que, posteriormente, acogió los conciertos de los grupos "Pelepau", "TNT" y "Fanfarria Takikardia".
Pero toda fiesta es poca. Y tan poca. Los hubo que durante la jornada de ayer instalaron tiendas de campaña en la zona preparada para la acampada y que hoy amanecieron con ganas de más. Y a pedir de boca. Aunque el día grande de este festival campestre fue ayer, hoy también hay sitio para más. A las 12,00 horas está prevista la sesión vermú, animada por grupos tradicionales. Después de la reunión, los más ansiosos disfrutarán de una comida campestre, si el calor lo permite.
Sea como sea, donde hay fiesta hay alegría. Y sino que se lo digan a quien se dio cita en el "Laroucofest" de Baltar.
