No arrancó bien, pero ya empieza a carburar un Lleida que tras el descenso, a manos del COB, y “compra” de plaza de 2021 se ha acostumbrado a estar con los mejores. De aquel punto y aparte es el técnico Gerard Encuentra el símbolo de un proyecto que, además de ganar mucho, es divertido de ver. A esa combinación de competitividad, espectáculo y química con la grada del Barris Nord deberá enfrentarse este domingo el COB.
Ya no están ni Juani Marcos ni Michael Carrera, pero el Lleida ha ido sabiendo cambiar cromos sin perder el estilo. Ahora quizá no hay un “killer” definido, pero sí muchos jugadores con calidad, experiencia o atleticismo para llevar el peso de cada partido. Y, sobre todo, un equipo que juega cada vez mejor.
Nacho Arroyo es, con 23 años, el veterano de una pareja de bases con físico en las piernas y mucho desparpajo y en la que Rafa Villar juega con la medalla de Campeón del Mundo júnior al cuello.
En el perímetro, puntos y más puntos. De todos los estilos. La calidad de Hasbrouck, la verticalidad de Brito, la explosividad de Lobo, la veteranía de Matulionis y el físico de Cuellar. Y varios de ellos teniendo que parar y volver a arrancar tras lesiones que les están haciendo perderse partidos en el inicio de temporada.
Por dentro, el factor diferencial llegó sobre la marcha. En las últimas temporadas en Lleida se han acostumbrado a ir “probando” pívots hasta dar con la tecla. Este verano no ha sido distinto y uno de los que llegó a última hora ya no está. Se fue Quintroll Thomas y llegó Cameron Krutwig. Con el cambio el equipo es otro. El COB lo tanteó, pero fichó en un Betis que lo cortó para hacer hueco a un base. En Sevilla contaba poco y en Lleida es pieza clave. Uno de los mejores pívots pasadores de la competición y además con calidad para hacer puntos y físico para rebotear. En los cuatro últimos partidos el Lleida ha sumado tres de las cinco victorias que lleva y en ellas Krutwig promedia 9,5 puntos, 10,5 rebotes y 4,7 asistencias.
Javi Vega y Djordje Simeunovic aportan versatilidad al juego interior. El serbio con más presencia en la zona, el madrileño abriendo el campo desde la línea de tres puntos.
Kur Kuath
Capítulo aparte para el jugador Kur Kuath que cambió el rumbo del COB la temporada pasada. Se hizo de rogar en verano tras rechazar la opción de renovar en Ourense y acabó encontrando equipo en Lleida. Rendimiento inmediato para un pívot que es una garantía en las dos zonas y de espectáculo para la grada.
