El próximo rival del COB: Un nuevo Melilla fichaje a fichaje

El pívot Lepichev captura un rebote en Pumarín.
photo_camera El pívot Lepichev captura un rebote en Pumarín.
El rival mañana del COB es un Melilla claramente mejorado en nivel, juego y calidad tras la llegada de jugadores como Alvarado, Delas o Hearst

El decano de la LEB Oro nunca falta a la cita, aunque esta temporada fuese permutando la plaza con el Almansa tras haber descendido. El Melilla empezó mal también la actual campaña, pero fichaje a fichaje ha ido recomponiendo la plantilla hasta ser ahora un claro candidato a los play off.

El COB se medirá a un rival con mucha más calidad individual del que empezó la temporada y también respecto al que jugó en el Pazo hace mes y medio. Cada vez con un baloncesto más equilibrado, atrevido y anotador.

El primero en llegar fue Óscar Alvarado. Experiencia, control de los partidos y liderazgo para un equipo que empezó la liga con una victoria en las siete primeras jornadas.  Después llegó el veterano Mario Delas. En un equipo sin “cincos”, encontró un jugador capaz de defender a interiores grandes y con tiro a media distancia para ayudar también en ataque. Tiene minutos limitados, pero aportando. El último fichaje fue Zaid Hearst, uno de los mejores anotadores de LEB Oro con varios equipos y claramente a más en los últimos partidos. A fichaje por línea en una plantilla de la que salieron Marc-Eddy Norelia, Rokas Gadiliauskas, Justas Tamulis y Tim Richmond y a la que podría llegar algún pívot más si el mercado lo ofrece, aunque eso también puede suponer otra baja al listado. El que había llegado, Olaf Schaftenaar, no llegó ni a debutar.

Efecto Van Dyke

Poco a poco Rafa Monclova fue dando con la tecla y el Melilla empezó a ganar a los equipos de la zona media-baja, fue capaz de hacerlo también en la pista del Valladolid y tuvo contra las cuerdas al Estudiantes en el Javier Imbroda.

Le costará mucho al COB contener a un equipo que tiene ahora muchos focos de anotación y que cuenta con el jugador más en forma de la categoría. Parker van Dyke ha ido cogiendo el ritmo de una competición en la que es debutante y en la que promedia casi 27 puntos por partido en los dos últimos meses de competición.  Sin duda, foco de atención para la defensa cobista. Capaz de encadenar tiro, de anotar con buenos defensas encima y de asumir los tiros más importantes.  

Alvarado es una garantía para hacer jugar a un equipo que obliga a redoblar esfuerzos con Van Dyke, que ahora tiene un anotador más de garantías con Hearst, equilibrado físicamente con Varace y Lepichev y con un banquillo en el Marjanovic, Figueroa, Mulero o Menéndez tienen roles secundarios, pero dando siempre relevos de calidad.

Además, el Melilla juega en una de las pistas más complicadas de la competición. Además de la dificultad del viaje, los rivales se encuentran con el pabellón más frío de la liga. El club norteafricano ha hecho temporadas de todos los tipos, y hasta logró el ascenso a la Liga ACB, pero nunca ha conseguido tener ambiente en las gradas. Sin presión en contra, pero al COB, como a todos los equipos, le costará competir bien en esa pista.

Tras la victoria del Melilla en la primera vuelta, el partido de mañana vale doble. Con solo un partido de diferencia, el average y no encajar un 0-2 para posibles empates tiene que ser un aliciente extra para el equipo ourensano.

Te puede interesar