El COB intentará demostrar que está capacitado para pelear por la permanencia ante un Palencia que necesita ganar para no alejarse del play off
Una final. Como todas de aquí al final de temporada mientras las matemáticas funcionen. El COB recibe en el Pazo al Palencia (19:00 horas) todavía con un tercio de la primera vuelta por jugar, pero sabiendo que cada partido que pase sin ganar estará un poco más cerca del descenso a la LEB Plata.
El equipo ourensano se ha metido en un callejón tan estrecho que apenas tienen margen para moverse. Necesita ganar sin demora y a la vez recuperar la calma para volver al juego competitivo que ha perdido. Dos aspectos incompatibles y más aún para un plantilla inexperta.
Una espiral negativa que lo lleva cada vez más abajo deportiva y anímicamente. Ni juega ni entrena con la frescura que le permitió pensar en ganar hasta hace solo unas semanas. Se ha quedado sin alegría y se agarra a una tarde de inspiración en el tiro exterior o de cordura colectiva para romper una racha que es ya de seis derrotas consecutivas. Y al Pazo. Volverá a contar con una afición que no reprocha nada y que intentará empujar para ahuyentar los miedos, aunque no meta ni impida una sola canasta.
Liderazgo
Un presente demasiado gris para confiar en una victoria, pero innegociable. En medio de este panorama es donde tiene que pelear el COB si no quiere bajar los brazos antes de tiempo. Tendrá que morderse la lengua cuando las decisiones arbitrales sean dudosas, defender todavía más fuerte cuando el rival encadene acciones de acierto y ser todavía más valiente cuando el marcador sea negativo. Aspectos comunes en cualquier deporte que a día de hoy al COB lo invitan al suicidio.
El equipo ourensano está obligado a ser valiente. Necesita que Ahonen y Johnson sigan tirando del carro, pero jugadores como Trist o Manzano tienen que sumarse desde el principio a eso que se llama liderazgo. Obvio que una buena tarde en el tiro de Moreno y Kohs ayudaría, pero su rol no puede pasar de ahí.
Ndoye y Orlov tampoco son clave, pero sí imprescindibles. Lo de menos serán los puntos que anoten, pero sí tienen que ser intensos permanentemente. Y también inteligentes, no caer en las faltas prematuras que los condenan recurrentemente. Sobre todo al senegalés. La batería exterior del Palencia es temible, pero lo tendrá todavía más fácil si sus pívots hacen daño.
El Palencia también tiene problemas y limitaciones, pero suenan a broma comparado con las urgencias de su rival. Siguen buscando base convincente y sus 'cincos' no son tampoco determinantes. Pero con jugadores como Grimau, Pino, Otegui o ahora también Miso es muy complicado jugar mal al baloncesto. Aunque fuera de casa se empeñan en rebatirlo.
"Palencia es un equipo con muchas virtudes y con mucha capacidad física, pero sobre todo hace una cosa de forma espectacular, no pierde balones", avanza Gonzalo García de Vitoria. Y añade que "si queremos tener opciones tenemos que ser muy exigentes en nuestra defensa de uno contra uno".
Un partido muy exigente para un COB que recupera a Rokas Uzas, pierde a Alberto Maura y sigue esperando por dos fichajes imprescindibles.
Pazo Paco Paz, 19:00 horas.
