Opinión

Patchwork para hablar de otras cosas

La crisis global de la que no se logra salir, las ingentes deudas nacionales que agobian, el agujero negro de Grecia que amenaza con arrastrar a todos a un sumidero, la actualidad es deprimente. Tratemos de aliviarla encuadrándola en un patchwork, tela de retazos variada, para sacudirnos el fatalismo. “No siempre lo peor es cierto”, titulaba un acertado libro sobre el carácter español la académica Carmen Iglesias. Hay otras: acabo de ir con unos amigos -un inglés y una francesa que viven en Provenza (Francia) - de visita turística al “Triángulo de oro” madrileño formado por el Museo del Prado, el Thyssen-Bornemysza y el Reina Sofía. Los cuadros de Goya, Velázquez, Rubens, Brueghel o El Greco comunican una sensación de plenitud y riqueza. Asimismo, los grandes maestros de la pintura europea reunidos por el barón Thyssen y expuestos en el museo que lleva su nombre gracias al empeño de su mujer, Tita Cervera, forman una recopilación pictórica opulenta que levanta el ánimo. En el Reina Sofía, la espléndida colección moderna y contemporánea, presidida por el “Guernica” de Pablo Picasso e instalada en el antiguo Hospital General de Madrid, una obra maestra arquitectónica en sí, di otro repaso a obras imperecederas de Dalí, Miró, Juan Gris, Gargallo… y me sentí mejor. Quizá el arte no sea un instrumento adecuado para combatir el abatimiento por la mala gestión económica. Pero algo compensa.

Fuera de museos, “back to the reality”, volvimos a la incierta realidad, las bolsas se hundieron dos días y los periódicos advertían con su masoquismo acostumbrado que “si no se resuelve el caso de Grecia, no sobrevivirá el euro”. Y sin euro, Europa perderá su razón de ser.

La voz de alarma la dio el primer ministro heleno Yorgos Papandreu al anunciar que su gobierno no cumpliría los objetivos del ajuste ni este año ni el próximo. Recordemos que es su segundo ajuste, en el primero hicieron trampas con los presupuestos. Ahora Europa acepta el plan de Grecia pero aplaza la entrega la ayuda hasta tener mayores seguridades. Las noticias económicas son de nuevo lamentables, un rosario de cuentas cada vez más negras: la deuda griega alcanzará el 172% del Producto Interior Bruto (PIB) en 2012, la producción caerá este año un 5,5% y el próximo, un 2,5% y chirría con la frenada.

Por si fuera poco, se dibuja en el horizonte un nuevo peligro, la recesión; y los agoreros anuncian que su riesgo es superior al 40%. Nunca hubo tantas Casandras avisando de tantos males al mismo tiempo. El mexicano Ángel Gurría, secretario general de OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarollo Económico) que reúne a los 34 países más ricos del mundo, echó más leña al fuego al declarar que “Europa vive algo no muy distinto a una recesión”.

Estancamiento, recesión, la máquina se ha agripado. ¿Qué hacer? Grecia necesita un plan de rescate de 8.000 millones de euros que el Gobierno de Papandreu empleará urgentemente para pagar a maestros y médicos y deberá jubilar a 30.000 funcionarios que cobrarán sólo un 60% de su sueldo un año y después nada si no encuentran otro trabajo. Hoy en día la cifra de paro griego oficial es del 16%, la real ni se sabe. Grecia empieza un trimestre agónico según dicen los medios de comunicación.¡Uf! Para desengrasar de la angustiosa economía no hay nada mejor que adentrarse por las memorias póstumas del poeta José Ángel Valente que acaban de publicarse, “Diario íntimo”, un florilegio de pensamientos, críticas de gran altura y anotaciones realizadas entre 1959 y 2000 por el ensayista orensano, Premio Príncipe de Asturias de las Letras, que tuve el honor de tratar en particular en París cuando fue director de traductores de la UNESCO.

Las notas del excelente poeta cuyo primer libro “A modo de esperanza” ganó el premio Adonais son de un espíritu cultivado y superior. Los autores que leía y que aparecen en sus notas revelan a un gran intelectual. Aludiré a una sola referida al filósofo Kant del que recoge la “Consideración de la paloma”, que ignora que “el medio aéreo que se le resiste es el que le permite sostenerse en vuelo”. Estos sutiles pensamientos están muy lejos de la grosera actualidad cotidiana de Bolsas y Mercados donde no hay más ley que la especulación y el lucro.

Quiero ser exhaustivo, permítanme insistir. No hay más que coger aguja e hilo e hilvanar las noticias dramáticas de los diarios para hacerse una idea de la gravedad de la situación. La actualidad es más económica y financiera que nunca, los titulares alarmantes. “Sin una recapitalización rápida, obligada por la deuda griega, la banca europea puede colapsarse”. Esta recapitalización se cifra en la inyección al sistema financiero de cantidades siderales de miles de millones de euros, que no existen más que en papel y en cálculos de economistas. Las autoridades europeas se niegan a reconocer la urgencia de momento manteniendo a todo mundo en ascuas. Para aumentar la presión en busca de beneficio rápido, las agencias de calificación “Moody’s”, “Standard&Poor’s” y “Fitch”, todas norteamericanas, acaban de rebajar la nota de la deuda española pasándola de la triple AAA a AA menos, lo que hace cada vez más necesaria la creación de una agencia de calificación en Europa porque a Italia le pasó lo mismo. La troika europea, reunida en Berlín bajo los auspicios de Angela Merkel, entre la presidenta del FMI, Christine Lagarde, el presidente del BCE,Jean-Claude Trichet y el presidente del Banco Mundial, Robert Zoellick, elogió los proyectos de recapitalización de los bancos con problemas pero las decisiones se aplazaron hasta la próxima reunión del “G-20” -los países más ricos del mundo- en noviembre en Cannes (Francia). Hasta entonces, hay que cruzar los dedos.

Por cierto, en la profusión de obras maestras del Museo del Prado hay una de Goya que parece menor entre tanta pintura del artista: “Perro semihundido”, quizás uno de los primeros cuadros abstractos de la historia, en verde y ocre, que muestra una cabeza de perro “dialogando con lo desconocido” según los críticos, que se consideró imagen de la inquietud y lo enigmático  y quedó como una de las referencias del mundo cultural. No se lo pierdan en su próxima visita al Prado.

Traté de entreverar referencias culturales para quitar hierro a un mundo que no gana para sustos. En cuanto al porvenir, digamos para terminar con una pizca optimismo que no hay nada escrito en el encerado. Pero si no se resuelve la crisis de Grecia…

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