Opinión

Somos 'chachis' y no llegamos a 'guay'

Andaba este chófer de anécdotas sabaneando el día para escribir este artículo, cuando llegó Violeta y proclamó: 'No pienses más. La idea te la doy yo. Somos especialistas en chupar del frasco y en vivir de la subvención'. Resulta que Violeta es licenciada y curra en una tienda de telefonía móvil. Había muchos asuntos para trasladar al papel, como la conferencia de presidentes que va a organizar Núñez Feijóo para salir en la foto con todos los que antes calentaron la silla o se calentaron en el cargo. También se podría cargar la tecla en el Debate del Estado de la Autonomía de octubre, que sólo sirve para que los palmeros de la mayoría absoluta, pertenezcan al partido que sea, aplaudan con las orejas sin haber escuchado nada de lo que dice su líder. Lo de la rapaza que murió o mataron en Compostela es un tema más delicado. Había varios asuntos, pero Violeta lleva razón: 'Somos especialistas en chupar del frasco o en vivir de la subevención'.

'Aquí lo que no hay son ganas de currar. Los españoles tienen ganas de estar en la playa y en rascársela a dos manos y luego le exigimos a los políticos. Así es imposible levantar un país', sentenció. La moza, sobradamente preparada.está quemada porque hace unos días le ofreció un contrato de 1.000 euros a un tipo que tenía EGB para vender su producto. Y el rapaz le dijo que las naranjas de la china las cultivaban los chinos, que sus manos valen mucho más y que al abrigo del paro hace menos frío. El tipo que acaba de contratar, con el mismo nivel de estudios, le llega todos los días tarde y no le hables de pasar la fregona. Quiere decir que todos nos creemos hijos de ministro, porque de otra manera sería imposible entender el desaire. 'Vamos de chachi y no llegamos a guay', se decía hace no mucho tiempo para calificar a las personas con aspiraciones con poco futuro. El futuro lo tenemos en nuestras manos, hay miles de bajos y comercios con el cartel de se alquila y... Claro que hubo un tipo como Amancio Ortega que entendió el dicho popular que dice que 'el que tiene el culo arrendado no caga cuando quiere'. Y después de que el tipo la haya liado gorda, también se le zoupa porque haya dado 20 millones de euros a Cáritas. Ya sabemos que los políticos sólo cuidan su trasero, pero todo el mundo tendría que saber que el futuro está al alcance de los dedos. Y perdón por los muchos que valen la pena.

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