La declaración de la ZEPA bloquea la recuperación de la antigua Lagoa. La Confederación Miño-Sil, que elaboró un plan para recuperar humedales limianos, no decidirá si lo ejecuta o no hasta que la Xunta ultime el plan de gestión de la ZEPA.
La Confederación Hidrográfica del Miño-Sil no ejecutará el proyecto para recuperar humedales en la antigua Lagoa de Antela hasta conocer el futuro plan de gestión sobre la ZEPA en la comarca.
Este proyecto, también conocido como plan de recuperación parcial de A Lagoa de Antela, se basa en actuaciones para restaurar antiguos humedales desecados desde 1958, facilitando el anegamiento de zonas no cultivadas para recrear el hábitat que tuvo durante milenios la desecada laguna.
La paralización obedece, según la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil al fin de no interferir ni en el proceso de declaración de la ZEPA ni en el proceso de concentración que parece estar llevando a cabo la Xunta con los principales sectores afectados por la citada declaración.
La Confederación asumió ha ber optado por actuar con prudencia, y expuso que la ejecución del proyecto dependerá de los términos del plan de gestión del espacio protegido (ZEPA) que debe realizar la Xunta, ya que esa espera es lo adecuado para comprobar que las actua ciones a realizar por este organismo de cuenca sean compatibles con el citado plan. El coste del estudio hidrológico fue de 293.721 euros. El plan de gestión de la ZEPA no será redactado, previsiblemente, antes de varios meses.
Este proyecto, también conocido como plan de recuperación parcial de A Lagoa de Antela, se basa en actuaciones para restaurar antiguos humedales desecados desde 1958, facilitando el anegamiento de zonas no cultivadas para recrear el hábitat que tuvo durante milenios la desecada laguna.
La paralización obedece, según la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil al fin de no interferir ni en el proceso de declaración de la ZEPA ni en el proceso de concentración que parece estar llevando a cabo la Xunta con los principales sectores afectados por la citada declaración.
La Confederación asumió ha ber optado por actuar con prudencia, y expuso que la ejecución del proyecto dependerá de los términos del plan de gestión del espacio protegido (ZEPA) que debe realizar la Xunta, ya que esa espera es lo adecuado para comprobar que las actua ciones a realizar por este organismo de cuenca sean compatibles con el citado plan. El coste del estudio hidrológico fue de 293.721 euros. El plan de gestión de la ZEPA no será redactado, previsiblemente, antes de varios meses.
