La contaminación originada privó de agua potable a los vecinos de la localidad de Tosende durante una semana

Detenido un matrimonio de Baltar por echar gasóleo a la traída en 2009

El depósito de agua de Tosende, en el que echaron gasóleo en octubre del año 2009. (Foto: XESÚS FARIÑAS)
Un matrimonio de Tosende (Baltar), José C.R. y Carmen G.N., ambos de 54 años, fueron detenidos como presuntos autores de un delito contra la salud pública al supuestamente verter gasóleo en el depósito de agua y canalizaciones que abastecen al pueblo, en el que residen 30 vecinos.
Los hechos se remontan al 15 de octubre del año 2009 cuando los vecinos descubrieron que el agua tenía un fuerte olor a combustible. Entonces, ninguno de los residentes sufrió una intoxicación dado que ya estaban en alerta, días antes las tuberías de la traída habían aparecido rotas.

El alcalde de Baltar, José Antonio Feijóo, recordaba ayer que los vecinos estuvieron algo más de una semana sin suministro (se abastecían en fuentes públicas), 'porque hubo que limpiar el depósito y todas las tuberías varias veces para eliminar el combustible', afirmó, mostrándose sorprendido por la detención del matrimonio. 'Creí que la denuncia ya estaba archivada. Reconozco que la detención me sorprendió y lamento que sucedan estos hechos', apuntó el regidor.

Los detenidos regentan una explotación ganadera en los alrededores de Tosende y la Guardia Civil procedió a su arresto después de hallar 'indicios' y 'hechos' de que son los autores de verter hidrocarburos en la red de saneamiento. La motivación, según fuentes de instituto armado, es que se sintieran perjudicados en el servicio de abastecimiento por 'el cambio de trayectoria de las tuberías de agua con la puesta en servicio de un nuevo depósito'.

Las obras que se realizaron entonces en la traída alejaron las tuberías de la explotación ganadera del matrimonio detenido, que en la actualidad no se abastece de la traída. Según José Antonio Feijóo, aprovechan los restos de una fuente pública para dar de beber al ganado vacuno y la limpieza de instalaciones.

Los vecinos ya se habían olvidado de la situación y el arresto del matrimonio los sorprendió, pero ninguno de ellos se atrevía ayer a hablar abiertamente del caso, pese a que cuando sucedieron los hechos reclamaban que se buscara a los culpables y fueran castigados.

El matrimonio prestó ayer declaración en el Juzgado de Instrucción de Xinzo y quedó en libertad con cargos.

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