Los agricultores de A Limia inician estos días las labores de recolección de una de las mejores cosechas de patata de los últimos años. La caída de algunas lluvias en julio y el buen tiempo ha provocado una maduración óptima de las plantas, iniciándose la colleita dos semanas antes de lo habitual con buen estado de salubridad y unas excelentes previsiones en cuanto a cantidad. La cifra total que se recogerá rondará los 100 millones de kilos. Las labores se extenderán hasta finales de octubre.
Un par de semanas antes que otros años, los agricultores de A Limia inician las labores de recolección de la cosecha de patata, que no se empezarán a generalizar hasta el mes de septiembre.
Este ligero adelanto se debe a la buena maduración de las plantas, a las lluvias de julio (que evitó algún regadío) y el buen tiempo de las últimas semanas.
El secretario del Consello Regulador, Ricardo Losada, auguró que va a ser una buena cosecha. El estado sanitario de las fincas es muy aceptable, no ha habido ningún problema en ese sentido.
El responsable local del Sindicato Labrego Galego, Anxo Pérez Rúa, habló dunhas previsións moi boas, cunha calidad que se estima vai ser moi boa.
El presidente de la asociación de regantes Verdelimia, Javier Rodríguez, consideró que las altas temperaturas que estamos teniendo estos días han provocado que no haya prácticamente problemas de la plaga del mildiu en las fincas, y eso es muy importante. Las primeras estimaciones apuntan a una cosecha por encima de los 100 millones de kilos, con un buen rendimiento por hectárea; aunque no habrá cifras oficiales hasta dentro de un mes.
Los precios
Aún no hay precios de referencia, aunque, como cada año, son muchos los agricultores que tienen ya de antemano las patatas recogidas por contrato a almacenistas locales a precios que rondan los 12 céntimos de euros, una tasación razonable, aunque algunos labradores lamentan que el continuo alza de los costes de producción (lo que cuesta recolectar un kilo de patata) son cada vez máis elevados.
Imprevisible
La evolución de los precios de cara a las próximas semanas es imprevisible. El consumo de la patata ha caído por la crisis económica general. La gran ventaja del tubérculo limiano es que su demanda suele incrementarse cuando el otoño ya está avanzado (hacia finales de año), por lo que los agricultores pueden esperar a ver un posible repunte de precios hacia esas fechas.
Durante los últimos diez años, esos precios han llegado a oscilar en momentos puntuales entre los 3 y los 40 céntimos por kilo de variedades como la Kennebec, lo que demuestra los dientes de sierra de este mercado patatero.
TUBÉRCULO
Sólo un 7% se venden como de calidade
El Consejo Regulador de Xinzo está a punto de cerrar la campaña patatera 2008-2009 con unos siete millones de kilos comercializados; menos de un 7% de la cifra total de la producción de la comarca de A Limia. Los rigurosos criterios de selección del tubérculo con el sello de la Indicación Geográfica Protegida (IGP) hacen que no se alcance un porcentaje mayor. Las dos variedades más producidas en la comarca antelana son la Kennebec (la única amparada por el Consello Regulador de Xinzo) y la agria (usada para la elaboración de patata frita). Los dos tipos suponen más del 80% del tubérculo que se recogerá en las fincas antelanas durante los dos próximos meses.
Este ligero adelanto se debe a la buena maduración de las plantas, a las lluvias de julio (que evitó algún regadío) y el buen tiempo de las últimas semanas.
El secretario del Consello Regulador, Ricardo Losada, auguró que va a ser una buena cosecha. El estado sanitario de las fincas es muy aceptable, no ha habido ningún problema en ese sentido.
El responsable local del Sindicato Labrego Galego, Anxo Pérez Rúa, habló dunhas previsións moi boas, cunha calidad que se estima vai ser moi boa.
El presidente de la asociación de regantes Verdelimia, Javier Rodríguez, consideró que las altas temperaturas que estamos teniendo estos días han provocado que no haya prácticamente problemas de la plaga del mildiu en las fincas, y eso es muy importante. Las primeras estimaciones apuntan a una cosecha por encima de los 100 millones de kilos, con un buen rendimiento por hectárea; aunque no habrá cifras oficiales hasta dentro de un mes.
Los precios
Aún no hay precios de referencia, aunque, como cada año, son muchos los agricultores que tienen ya de antemano las patatas recogidas por contrato a almacenistas locales a precios que rondan los 12 céntimos de euros, una tasación razonable, aunque algunos labradores lamentan que el continuo alza de los costes de producción (lo que cuesta recolectar un kilo de patata) son cada vez máis elevados.
Imprevisible
La evolución de los precios de cara a las próximas semanas es imprevisible. El consumo de la patata ha caído por la crisis económica general. La gran ventaja del tubérculo limiano es que su demanda suele incrementarse cuando el otoño ya está avanzado (hacia finales de año), por lo que los agricultores pueden esperar a ver un posible repunte de precios hacia esas fechas.
Durante los últimos diez años, esos precios han llegado a oscilar en momentos puntuales entre los 3 y los 40 céntimos por kilo de variedades como la Kennebec, lo que demuestra los dientes de sierra de este mercado patatero.
TUBÉRCULO
Sólo un 7% se venden como de calidade
El Consejo Regulador de Xinzo está a punto de cerrar la campaña patatera 2008-2009 con unos siete millones de kilos comercializados; menos de un 7% de la cifra total de la producción de la comarca de A Limia. Los rigurosos criterios de selección del tubérculo con el sello de la Indicación Geográfica Protegida (IGP) hacen que no se alcance un porcentaje mayor. Las dos variedades más producidas en la comarca antelana son la Kennebec (la única amparada por el Consello Regulador de Xinzo) y la agria (usada para la elaboración de patata frita). Los dos tipos suponen más del 80% del tubérculo que se recogerá en las fincas antelanas durante los dos próximos meses.
