El municipio se prepara para festejar un intenso fin de semana que alternará las carreras con los pasacalles musicales
La Festa do Boi alcanza el ecuador de las celebraciones en Allariz con mucha intensidad en las carreras y una gran participación en las actividades paralelas, que hoy estarán especialmente dedicadas a los más pequeños, con merienda infantil, carrera y espectáculo de marionetas.
El concejal de Protección Civil, Bernardo Varela, comentaba que "tivemos un par de exemplares moi vivos" y reconocó que tras la Proba do Boi del sábado ya hubo que cambiar a uno de los ejemplares por ser "demasiado lanzado", mientras que el domingo hubo un par de sustos sin incidencias entre los participantes en la carrera medieval, si bien no hubo que lamentar daños personales. "O de onte -por el lunes- viña moi fresco de Penamá e levounos de paseo ata o cemiterio", matizó Varela.
Este tipo de hechos son habituales en el devenir de las diferentes ediciones y es por eso que desde la organización insisten en la necesidad de respetar las indicaciones de los Homes do Sedeño e a Aguillada, evitar pasear con niños por el casco durante el tiempo de las carreras y acudir con calzado adecuado.
El municipio, donde las bombas volvieron a sonar ayer por partida doble en dos carreras llenas de emoción, espera ansioso la cena vecinal de mañana jueves, en la antesala del fin de semana grande, donde Allariz será una fiesta continua marcada por las carreras y los pasacalles musicales.
