La Consellería de Medio Ambiente busca a los posibles propietarios de la conocida como Casa da Escusalla

Una casa con fantasmas de Lobios será el centro de interpretación del Parque natural del Xurés

La Casa Escusalla, ubicada en la parroquia de Manín, está en un avanzado estado de abandono. (Foto: Xesús Fariñas)
Convertir la Casa Escusalla en un centro activo para la recepción de visitantes y vecinos de A Baixa Limia y del Xurés es el objetivo de la Consellería de Medio Ambiente que está liderando el proceso administrativo para dar con los propietarios.

El Parque Natural Baixa Limia-Serra do Xurés, dependiente de la Consellería de Medio Ambiente de la Xunta de Galicia, está inmerso en un proceso burocrático para conocer y verificar la documentación de los posibles propietarios de la ‘Casa Escusalla’. Un edificio emblemático de la comarca de A Baixa Limia, ubicado en el lugar de Ludeiros, en la parroquia de San Salvador de Manín (Concello de Lobios). ‘Por su capilla adosada, la tradición le asigna un origen clerical a la casa, aunque las opiniones sobre su origen se reparten entre un antiguo cenobio, un edificio que fue sede de la Inquisición y también como casa rectoral’, relata José Lamela, alcalde de Lobios y un estudioso del inmueble.

La Delegación de Economía y Hacienda de Ourense inició en el año 2007 un expediente de investigación referente a la presunta propiedad patrimonial de la Administración General del Estado de la finca. ‘En la actualidad, los técnicos de Patrimonio y de Hacienda están llevando a cabo un proceso administrativo que, una vez finalizado y si realmente existe algún propietario documentado, la Consellería de Medio Ambiente liderará para llevar a cabo la negociación con los titulares del inmueble para conseguir la propiedad para el Parque do Xurés’, relatan desde el departamento autonómico que preside Manuel Vázquez. Ubicado junto a la carretera OU-540, desde Lobios a la frontera portuguesa, ‘non hai en toda A Baixa Limia un edificio tan impresionante e emblemático como a Casa Escusalla, cunha balconada ao Xurés’, describe el director xeral de Conservación da Natureza, Xosé Benito Reza, quien apunta que ‘é un sitio moi axeitado para crear nel unha zona de servizos para o parque’. El que durante años fue director del Parque do Xurés explica que, entre los planes que se barajan para el inmueble, se encuentra su recuperación para convertir la antigua casa-monasterio en un centro de interpretación para la recepción de vecinos y visitantes de A Baixa Limia y del Parque Natural. ‘Queremos que sexa un edificio para a xente, que non sexa algo morto’, subrayaba.

Ocio y exposición


En mente de los responsables de la Consellería de Medio Ambiente, está la creación de una zona de exposición sobre la riqueza natural y cultural del parque, ‘e outra que tamén dea servizos os veciños e os turistas do parque cunha tenda-restaurante con productos locais como os queixos ou a mel do Xurés’, añadía Xosé Benito Reza quien señalaba que ‘no inmoble hai espazo de sobra para combinar ambos aspectos’.

EL FANTASMA DE UN FRAILE


El edificio, abandonado desde hace años, ha sido víctima de numerosos expolios por parte de amigos de lo ajeno, a pesar de las leyendas de los lugareños, sobre la existencia de un fantasma. Cuentan en A Baixa Limia, entre ellos el alcalde de Lobios, que ‘en el edificio reside un fantasma -un fraile de hábitos blancos y cara escondida con una capuchaque, en las noches de luna llena, se desplaza en silencio por la casa acompañado por dos enigmáticas damas’, relata Lamela.



Te puede interesar