Juan José Outeda: “Hay que hacer una oferta variada y con perspectiva para que la gente no se vaya”

Niños, adolescentes y adultos son los destinatarios del nuevo taller de arte que se imparte en el centro sociocomunitario de Celanova. Un espacio emblemático del cenobio de San Rosendo que este año ha multiplicado sus actividades y eventos con el objetivo de convertirse en un punto de encuentro intergeneracional. El ilustrador argentino, que también es profesor de defensa personal, Juan José Outeda comenta los objetivos de la actividad. ¿Cómo nació este curso? Hace un año que llegué aquí, concretamente a Coveliñas (Ramirás), con la idea de buscar un lugar donde dar clases, abrir un taller propio con mi mujer. Por diferentes motivos, acabamos hablando con Manu del centro sociocomunitario y desde el primer momento nos dijo ¡vénganse! Desde el centro están tratando de captar diferentes cosas para ofertar a los mayores y también a los más jóvenes. A los chicos los sacas del fútbol y poca cosa más. Por eso hay que darles cosas que hacer, con perspectiva, y también para que no se vayan a otro lado. ¿Cómo ha sido la acogida en Celanova? Bien, empezamos el mes pasado con 13 alumnos. Nosotros en Argentina vivíamos en un pueblo rural como Celanova y allí, la mayor cantidad de alumnos eran chavales de la escuela. Aquí es al revés. El 99% son adultos y tiene su lógica porque la población aquí está envejecida. En Coveliñas nosotros somos de los más jóvenes del pueblo. ¿Qué buscan los asistentes al taller? Hay de todo. Hay quien no tuvo una oportunidad, por cercanía o lo que fuese, de estudiar o desarrollar su arte, y hay un montón de gente que está desesperada por hacer algo porque se aburre y de golpe ve que la pintura le gusta, se divierte y, además, hace terapia. Allá en Argentina también lo teníamos (risas). Es un lugar de encuentro, es la excusa muchas veces para salir y charlar. Usted es además instructor del curso de Kapap Sí. Yo, en otra vida completamente separada, soy instructor de defensa personal, específicamente de Kapap. No es una arte marcial, es defensa personal y animaría a la gente a que venga a probar. Hablar de defensa personal en un lugar como en España, específicamente en Galicia, en Celanova, como que no hace falta. Pero hay que verlo por el lado lúdico, de la práctica de ejercicio.