Piedras contra los molinos

photo_camera Participantes en la marcha vecinal en defensa del monte. LR
Información, investigación y protección para el patrimonio, pero también para el medio ambiente, fueron algunas de las reivindicaciones de los participantes en la primera marcha organizada por Stop Eólicos Xurés Celanova en defensa de la Casa da Neve.

Más de medio centenar de vecinos de Celanova, Bande, Muíños, Cartelle, Ramirás, A Merca, Ourense o Verea marchó ayer en defensa de la Casa da Neve, el monte que perfila la panorámica de Celanova y en cuyas inmediaciones está proyectada la creación de un parque eólico con siete aerogeneradores de 42 megavatios de potencia, en los límites con Verea. “Vimos primeiro para informarnos, por ter a información da que carecemos porque o Concello non informou de nada e o proxecto non está ningún sitio. E, en segundo lugar, para protexer o patrimonio, a auga”, señalaba una de las vecinas de Celanova para quien, la participación en la ruta de once kilómetros supuso, como para la gran mayoría, el descubrimiento de una parte olvidada del patrimonio celanovés.

Se trata de los emplazamientos de Soutomanco, San Salvador, Poleiares, las Torres de Valvis del Conde Hermenegildo (abuelo de San Rosendo) o Cachiquimbra. Lugares de los que apenas quedan vestigios y de los que pocos habían oído hablar, pero que datarían de un periodo anterior a la fundación de la villa de San Rosendo, y que ya fueron recogidos hace cuatro siglos por fray Benito de la Cueva en su libro “Celanova Ilustrada” y visitados por el Padre Sarmiento en el siglo XVIII. 

Un patrimonio sin explorar, matizaban los guías de esta expedición Xosé Benito Reza y David Pérez, que se une a la sí conocida Casa da Neve, una construcción a casi 900 metros de altura erigida por los monjes del cenobio para usarlo de nevera y cuyos restos son visitables tras una incursión en un pinar, el Camino Natural de San Rosendo que viene desde Bande siguiendo el trazado de una calzada romana secundaria, y el túmulo megalítico que conforman las mámoas de A Chaira y que los promotores del polígono eólico tuvieron que analizar al detalle para poder ubicar los aerogeneradores en el documento de inicio que presentaron a principios de año ante la Xunta de Galicia. 

La plataforma Stop Eólicos Xurés Celanova, constituida a raíz de la proliferación de propuestas eólicas en montes de Celanova, Verea y, más al sur, Bande y Calvos de Randín, fue la encargada de liderar la marcha, donde también se hizo especial alusión a los perjuicios medioambientales y de la calidad de vida de la población.  “Non estamos en contra da enerxía eólica, estamos en contra do plan eólico de Galicia porque non ten ningún tipo de xestión nin de avaliación”, resaltaba Ángel Dorrío de Amigos da Terra, uno de los 25 colectivos y asociaciones que apoyaron la convocatoria de ayer.

Te puede interesar