Tras su paso por el Teatro Villaroel de Barcelona, donde se representó del 30 de septiembre al 8 de noviembre la obra 'El año que viene será mejor' llega a Madrid para representarse en el Teatro Bellas Artes del 11 al 22 de enero.
Esta comedia, escrita a cuatro manos por las dramaturgas Marta Buchaca, Carol López, Mercè Sarrias y Victòria Szpunberg, es un texto lleno de humor que relata a través de un collage historias que hablan de la sociedad actual, contracrónicas que narran las visicitudes de una generación de personas que les ha tocado vivir y sufrir la realidad cotidiana de hoy en día, retales de vida contemplados desde una óptica cómica y sarcástica con réplicas muy agudas y punzantes.
El reparto está compuesto por las actrices catalanas Neus Bernaus, Alba Florejachs, Mireia Pàmies y Vannesa Segura, todas ellas dirigidas por Mercè Vila Godoy.
La función está construida a base de retales de vida, breves monólogos, pensamientos, crónicas, pequeños diálogos, inicios de algo, fragmentos de historias, fotografías de nuestra realidad, palabras para ser lanzadas contra las paredes, sin florituras, sin maquillaje. Las cuatro actrices se multiplican en mujeres diferentes para hablar de lo que nos rodea. Son historias de crisis, de querer salir, de insatisfacción, narradas con mucho humor.
'TODO CAMBIARÁ'
Carol López explica que su idea inicial fue reunir un equipo de gente para hacer un proyecto. 'Es una cosa que siempre se ha hecho desde el teatro público, como el proyecto T6 del TNC, y pensé que también se podía hacer desde el ámbito privado y que sería una experiencia muy positiva', indica.
Por su parte, Marta Buchaca señala que lo más interesante ha sido trabajar 'a pie de escenario'. 'Enviábamos textos y veníamos al local de ensayo a probarlos. La directora, Mercè Vila, nos decía los cambios que ella consideraba y entre nosotras opinábamos mucho. Ha sido muy enriquecedor hacer un espectáculo a ocho manos o más, porque las actrices también han intervenido, así como la directora', apunta confesando que lo mejor sería que la gente salga del teatro pensando 'estamos jodidos, pero tiraremos adelante'.
Carol López matiza: 'no estamos haciendo una obra social y tampoco pretendemos frivolizar sobre los temas que tratamos. Es una obra para que la gente se lo pase bien'.
Pero Victoria Szpunberg advierte: 'el trabajo es importante y estamos llegando a una psicosis colectiva que lleva al egoísmo de querer quedarte con tu silla; eso me preocupa porque se están fomentando ambientes de trabajo muy egoístas y estresantes'.
Mercè Sarrias prefiere hablar de 'proyección de futuro': 'que tengamos la idea de que hay un futuro, que todo cambiará, que será más fácil. Que podamos pensar qué haremos de aquí cinco años y no, como hacemos ahora, lo que nos pasará dentro de dos días', dice.
