Embajador mexicano preside reunión de la UNESCO sobre el contrabando cultural

El embajador de México ante la UNESCO, Carlos de Icaza, fue elegido presidente de la reunión contra el tráfico ilícito de bienes culturales que celebra esa organización de las Naciones Unidas en París hoy y mañana, informó hoy la diplomacia mexicana.
De Icaza fue votado por unanimidad para presidir la 'segunda reunión de los Estados parte de la Convención sobre las medidas que deben adoptarse para prohibir e impedir la importación, la exportación y la transferencia de propiedad ilícita de Bienes Culturales', conocida como Convención de 1970 y ratificada por 122 países.

Dicha reunión tiene por objetivo optimizar la ejecución de la citada convención y evaluar su eficacia, así como mejorar los mecanismos de seguimiento de ese tratado internacional, agregó la Representación Permanente de México ante la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), con sede en París.

Tras más de 40 años de aplicación, los Estados miembros han reconocido que 'la normativa contenida en ésta no es suficiente y debe ser reforzada', esencialmente en lo que se refiere a 'excavaciones ilícitas y pillajes de sitios arqueológicos'.

México es uno de los países amenazados por este fenómeno, agrega el comunicado, en el que se recuerda que el país norteamericano ha firmado acuerdos bilaterales en esa materia con Estados Unidos, Bolivia, Guatemala, Perú, Belize, Bolivia y El Salvador, que han servido 'para recuperar 3.900 piezas arqueológicas en los últimos años'.

El embajador mexicano ante la UNESCO destacó el papel de la Convención de 1970 porque 'sintetiza el compromiso de los Estados por establecer un mecanismo de cooperación interestatal con efectos universales para combatir el tráfico ilícito de bienes culturales', apuntó.

'Me comprometo a apoyar la conciliación de posiciones para encontrar un mecanismo que evite que tengan que pasar otros 40 años para tener otra reunión de este tipo. Necesitamos crear las bases que permitan dar seguimiento efectivo a la aplicación de la Convención. Es una tarea urgente sobre la cual, por muchos años, se esperan resultados de la UNESCO', agregó.

Te puede interesar