Manuel Rivas critica las 'faltas de respeto' a Galicia en su último libro

El escritor Manuel Rivas. (Foto: X. Rey)
El escritor Manuel Rivas ha presentado esta tarde en Compostela su último libro, 'Episodios galegos. Tempos de esperpento' (Xerais), en el que critica con dureza la 'deconstrucción y las faltas de respeto' a Galicia en la actualidad contemporánea.
El autor explicó, en la librería compostelana 'Couceiro', que esta situación de 'esperpento' se produce de forma especialmente agravada desde el cambio de Gobierno autonómico el pasado mes de marzo.

El libro recoge una antología de los artículos del escritor coruñés aparecidos durante el último año en el suplemento 'Luces', de la edición gallega del diario El País, y en ellos analiza con su habitual 'retranca' fenómenos contemporáneos 'que distinguen Galicia de los demás países del mundo', como la 'desaparición' de la selección gallega de fútbol o que gran parte de los miembros del Gobierno gallego desconozcan la lengua propia del país.

En este sentido, Rivas afirmó que lo 'verdaderamente grave' de este hecho no es tanto el desconocimiento de la lengua gallega por parte de destacados miembros de la Xunta, sino la total ausencia de intención de aprenderla y 'el desdén con el que manifiestan públicamente esa ignorancia', revelador de 'de la actitud que hay detrás' de esta postura.

Rivas ha acuñado el término 'neo-caciquismo posh' para definir 'la nueva relación entre poder y sociedad' con la que 'se está experimentando' en Galicia, y que, a su juicio, se resume en la conjunción del neoliberalismo económico, unido al sistema 'palo-zanahoria' caciquil, y la fascinación por lo anglosajón como valor cultural absoluto.

El autor de 'Que me queres, amor?', comparó el discurso dominante del Ejecutivo de Núñez Feijóo con la 'neolengua' descrita por George Orwell en su novela '1984', y que, en esencia, se basa en 'decir una cosa para hacer luego la contraria, robar el sentido de las palabras', que el escritor aboga por recuperar.

Rivas recuerda en el libro que el Partido Popular no habría ganado las elecciones si Galicia fuese una circunscripción electoral única, ya que las fuerzas del Gobierno bipartito sumaron siete mil votos más que el PP, a pesar de los 70.000 votos perdidos por el BNG y los 45.000 perdidos por el PSdeG.

En su opinión, Galicia lleva demasiados años buscando referentes para tomar como modelo en su construcción identitaria, como Escocia, Dinamarca o Eire, y, según dijo, es momento de 'apreciar Galicia como un modelo en si mismo' válido para 'pensar el mundo entero desde aquí'; un modelo, no obstante, que está siendo 'constantemente despreciado' por parte del poder actual.

Este modelo, según explicó, se basa en 'las condiciones excepcionales' de Galicia como encrucijada entre la cultura iberoamericana, la lusófona y la de la Europa atlántica, algo que 'podría hacer de éste un sitio fantástico en el que vivir' y en el que, sin embargo, se están dilapidando estas condiciones singulares.

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