La médico hizo el saque inicial en la victoria del Seixalbo (2-0) ante el Molgas con el gol de Ángel "Pato"
Leía en La Región la historia de Ángel y María José. Un experiencia que en diez meses se convirtió en anécdota, pero que despierta la parte más solidaria y humana de las personas. María José se acercó dándole igual todo, solo con la conciencia de ayudar a un joven futbolista que estaba herido. No se ponían cara, pero diez meses después el Seixalbo agradeció a la médico su acción en el partido de la lesión del delantero Ángel.
Sonriente y desubicada en el centro del campo de O Carqueixal, María José pateó el balón ante los aplausos de la grada y la cámara de los fotógrafos. La tarde parecía ir perfecta y lo fue. A los 20 minutos, Ángel García "Pato" marcó un gol que lleva una seña de identidad. El Seixalbo ganó una aficionada más y ella sintió que todo lo que ha hecho por el futbolista está recompensando, aunque no buscara un homenaje. Aunque lo hiciera por mera intuición o responsabilidad ética.
Da igual, cuando existen aspectos negativos en el fútbol se ensalzan, pero con estos gestos seguro que todos los partidos serían más limpios. Sin peleas, con humanidad.