El Verín cotejará en Cangas su nivel de acoplamiento ante un rival con mayor empaque

Alondras, un buen examen

Un jugador del Verín golpea el balón ante un defensor del Rápido.
Estrenar el casillero de puntos, revindicarse y ganar en tranquilidad. Esa es la meta que perseguirá esta tarde un Verín plagado de incógnitas y al que sólo la paciencia y el esfuerzo diario le permitirá superar la apreturas de su plantilla y la bisoñez de muchos de sus jugadores.
El inicio liguero confirmó las espectativas. El Verín salió con la fuerza de la gaseosas recié abiertas pero fue perdiendo gas con el paso de los minutos. Sacó tajada de ello el Rápido de Bouzas. Prolongar los buenos minutos y reducir los errores será la asignatura de los Tonino para esta tarde y para las siguientes jornadas. Nada extraño para un equipo con pocos pilares a los que agarrarse de inicio. Oli o Boris, que regresa al equipo, deberían ser dos de ellos.

El rival no facilitará el apren dizaje. El Alondras quizás no esté en las quinielas para luchar por el liderato de la Tercera pero sí tiene calidad para competir con solvencia y factor campo cuando ejerce de local. O Morrazo es un campo pequeño y en el su equipo juega un fútbol rápido y con muchas llegadas al área. Caloi, unas de las novedades del equipo esta temporada, dirige el juego en el centro del campo y Santi Domínguez es un seguro de vida en el área. El delantero ya fue el máximo goleador de la categoría hace algunas temporadas.

Campo maldito

El Verín intentará dar la sorpresa y de paso romper el gafe. En siete visitas de los ourensanos al campo de O Morrazo su mayor botín fue un empate y con sólo dos goles en su zurrón. Todo lo demás fueron derrotas.

Cangas, 18,00 horas.


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