Los aficionados que quieran colaborar a la restauración del Alpinche pueden sumarse y ser mecenas del proyecto
En algunas ocasiones, la que puede parecer la mayor de las desgracias termina convirtiéndose en una nueva oportunidad para seguir adelante.
En este caso, el accidente de José Pavón con el Porsche 911 R de Reverter bajando el Rodicio durante el Rally de Ourense de 1970 terminó siendo en el germen del que fue emblema y escudo de Lalao durante muchos años.
El proyecto no comenzó hasta 1971 cuando a Estanislao Reverter se le ocurrió unir la ligereza y maniobrabilidad del Renault Alpine A110 con la potencia y robustez de la mecánica del Porsche 911R.
En los talleres del empresario comenzó la ardua y compleja tarea de construcción, de la que se hizo eco por aquel entonces la revista Autopista en un extenso reportaje.
Cuando el coche estaba casi listo para su debut, programado para el Rías Baixas del año 71, un incendio en los talleres casi termina con el Alpinche envuelto en llamas, pero Reverter logró apagarlo antes de que fuese demasiado tarde. A cambio, varias quemaduras en la cara que le hicieron correr en Vigo muy mermado, obteniendo a pesar de todo, la tercera plaza de la general.
El Alpinche nunca fue un coche fácil de conducir, su potencia y escaso peso en la parte frontal hacían que perdiese apoyo y se fuese recto en las curvas. Para ello Reverter, junto a su mecánico José Rúas fue evolucionando el coche, sometiéndolo a distintas reformas para introducir un mayor número de componentes Porsche y aumentos de potencia.
Del primer motor, se pasó a un 2,4 y finalmente al 2,7 de 280 caballos. Para evitar las roturas de palieres se instalaron crucetas y estriados de Land Rover.
Además, en cuanto al aspecto externo el Alpinche también fue cambiando. Producto en parte de los accidentes que sufrían sus pilotos, la creación de Reverter fue mudando su aspecto paulatinamente.
Tras una salida de carretera de José Pavón en Castro de Beiro de 1974, el morro se reconstruye totalmente, instalándose un spoiler frontal que ocupa toda la parte delantera. Esta versión, la de 1974, será la que lucirá el coche cuando esté restaurado al 100%.
El frontal estilo ligier
Otro accidente, sufrido por Reverter en el Vasco Navarro de 1975 propició el cambio más radical del vehículo ourensano. El morro Renault fue reconstruido con la apariencia de los Ligier que participaban en circuitos en pruebas de resistencia.
Y con ese 'look' llegó el fatídico accidente de Beny Fernández en el Rally Sherry de 1975.
En aquel golpe, el Alpinche quedó totalmente destruido y guardado en un garaje durante 40 años.
La restauración
La Fundación Estanislao Reverter recupera los restos del Alpinche y desde hace meses recauda fondos para su restauración.
Ahora mismo, el preparador especializado en clásicos Marvic Sport se encuentra en pleno proceso de recuperación de la maltrecha carrocería del vehículo aunque el trayecto será largo y requerirá de una importante inversión.
De esta forma, desde la Fundación han puesto en marcha un programa de mecenazgo para empresas y particulares dirigido a todos aquellos que quieran contribuir a recuperar una pieza única del automovilismo nacional
Esta colaboración para aficionados, que puede desgravarse en parte en la declaración de la renta, da derecho a salir en un panel que se instalará en la zona del Alpinche del Museo de Santa Cruz y a una pegatina conmemorativa y de edición limitada.
En el caso de que se quiera participar a nivel empresarial, desde la Fundación se ofrece un lugar de privilegio en la vitrina del museo que visitan cada año cientos de aficionados al motor, la publicitación en la web y la aparición como colaborador en las informaciones que se publiquen en La Región.n
