El Atlético Arnoia se puso el traje de etiqueta y agradó en uno de los compromisos más difíciles de la temporada. Le visitaba el Portonovo, uno de los mejores equipos del campeonato, que, sin embargo, llegaba a esta cita con dinámica irregular en el último trecho competitivo. El conjunto de Manel con un buen arranque, desmontaba el entramado defensivo visitante a base de intensidad y empuje. También de velocidad, con Kike y Rubén Arce muy dinámicos que llevaban peligro por ambas bandas. La suma en ataque de los hermanos Lamelas, que regresaban al once harían el resto, para conseguir la victoria por 2-1, un resultado que pudo y debió ser superior.
Tras un centro al área que no encontró rematador, los locales en el minuto 8 sacaron provecho de su balón parado. “Banana” primorosa de Rubén Arce desde la esquina y remate inepelable de Rubén Lamelas a la red. Era el 1-0 que hacía justicia a lo visto en el campo.
Los visitantes tras el primer golpe, intentaron levantarse y avisaron por dos veces por medio de Pichi. Pero nada parecía resquebrajar el ánimo local, que volvía a buscar la portería contraria con fiereza. Kike, tras internarse en el área, disparaba y tras rechazar David Conde, meta visitante, el balón quedaba a los pies de Dani Lamelas, que en boca de gol no tuvo la fortuna de cara. El que sí la tendría sería Rubén Arce poco después al aprovechar un pase en largo y definiendo magistralmente por alto a la salida del portero visitante, colocando el 2-0 y abriendo brecha en el luminoso.
Cuando menos se esperaba, el Portonovo aprovechó una falta en el 26 para reducir diferencias a través de Casalderey, al cabezear en el punto de penalti a la derecha de Borja. Minutos después un golpe en la cara de Eloy a Aarón, que debutaba ante su nueva hinchada, encendía los ánimos y desataba la tensión de una decisión en amarillo que podría haber tornada tranquilamente a rojo. Antes del descanso, Dani Abalo y Rubén Lamelas en una falta, tendrían las últimas para sus respectivos equipos.
Tras el receso, nuevamente la estampida. Atlético Arnoia demostró hambre y por medio de un cabezazo del recién ingresado Martín Torres a centro de Kike y un tiro lejano de Veloso pudo incrementar la diferencia. También una falta botada por Rubén Lamelas que por milímetros no encontraba portería y dos nuevas oportunidades que fabricó un excepcional Kike asistiendo a Arce y marcándose un tiro cruzado tras un excepcional recorte.
Agitación final
Los últimos minutos fueron marcados por la agitación del público local ante un colegiado que no estuvo afortunado en sus decisiones y que perdonó la expulsión de Dani Abalo tras golpear en la cara a Rubén Arce. También prolongó en demasía. El Portonovo tuvo el empate en un tiro envenenado que pegó en un defensa y en otro desde lejos que Borja sacó como pudo. No hubo tiempo para más. Ganó el que pudo perfectamente golear.
