El Aguas de Sousas visitará mañana (21,00 horas) la cancha del Tenerife con las ausencias de los dos jugadores exteriores norteamericanos

Bajas en el COB, Hill y Guillandeaux

R. Guillandeaux está descartado para el partido de mañana en Tenerife. (Foto: LR.)
El Aguas de Sousas buscará mañana en Tenerife (21,00 horas) su cuarta victoria consecutiva. Tendrá que intentarlo sin su jugador exterior más desequilibrante, Ruben Guillandeaux, y sin el escolta Kyle Hill. Dos bajas notables en un equipo que tendrá como nota positiva el debut de Alberto Miguel.
El juego exterior es el centro de atención y el principal dolor de cabeza del equipo ourensano. Limitado en número y con la permanente duda del estado de forma de Hill. La lesión producida ayer no tiene nada que ver con la anterior en la rodilla izquierda pero volverá a condicionar el progreso físico de un jugador fuera de toda duda en el aspecto técnico y táctico.

En Tenerife se encontrará con un equipo crecido después de romper el pasado fin de semana en Ávila una interminable racha de ocho derrotas consecutivas. Un rival con plantilla para aspirar a algo más que la permanencia y más aún con el regreso del senegalés Michael Diouf y con la presencia cada vez más notable del pívot Javi Pérez.

La dudas en los chicharreros sigue estando lejos del aro. Guigou, Moore y Monroe no acaban de ser regulares. Tres jugadores con muchos puntos en las manos pero imprevisibles. Un buen espejo de lo que es su equipo. Capaz de hundirse estrepitosamente ante el Básquet Coruña y terminar la primera mitad con un -16 de valoración y una semana más tarde ganar en la complicada cancha del Ávila.

MOMENTO COMPLICADO
La situación clasificatoria no ayuda a mejorar el ánimo de un Tenerife en horas bajas. Mañana coincidirán en los banquillos Rafa Sanz y el que fuera su ayudante cuando el equipo el club acarició el regreso a la Liga ACB, Ruymán Delgado.

Ahora el Tenerife juega en el Municipal de Santa Cruz con una media de 300 espectadores en las gradas y asiste impotente a la explosión de su vecino, el Canarias. Los laguneros tienen un pie en la Liga ACB y lo hacen en una pista, el Santiago Martín, que fue el escenario de sus mayores gestas. La última afrenta podría llegar dentro de unos meses cuando el ascenso de su máximo rival se confirme con su propio aval debido a la extraña vinculación propuesta por las instituciones hace dos años.

El objetivo deportivo del Tenerife es terminar la Liga con buen sabor de boca y evitar el descenso a la Liga EBA. El primer paso está dado, romper la mala dinámica de resultados. 'Se hace mucho más fácil trabajar tras una victoria, sobre todo al conseguirla tras remontar dos situaciones adversas a lo largo del partido ante el Óbila pero aún no hemos hecho nada y tenemos que seguir mejorando”, asegura el técnico del equipo, Delgado. Un Tenerife obligado a reubicarse en la Liga y también en la isla. El mismo club, otros tiempos.

LOS PROTAGONISTAS
R. Guillandeaux: Dos semanas de baja
Ruben Guillandeaux está descartado para el partido de mañana en Tenerife. El alero norteamericano, con pasaporte dominicano, se lesionó el miércoles y su periodo de baja se estima en dos semanas aunque dependerá de su evolución. 'Tiene una distensión miotendinosa en la pierna izquierda', explica la fisioterapeuta del COB, Portal Álvarez.

Kyle Hill: Su lesión no está confirmada
La lesión de Kyle Hil está a la espera de ser explorada por el médico Benito Ramos para realizar un diagnóstico definitivo pero las primeras impresiones de la 'fisio' Portal Álvarez dejan su presencia en el partido de mañana 'muy en duda'. Hill se lesionó en la sesión de ayer por la tarde en el Pazo y todo apunta aun problema en los 'isquios' de la pierna derecha.

Alberto Miguel: Debutará en Tenerife
El jugador de Laredo llegó a Ourense el martes y ayer completó su primera jornada de entrenamientos con su nuevo equipo. Debutará mañana. 'Puede jugar desde ya. Llega a un equipo nuevo y necesita adaptación pero está preparado para jugar minutos', explica Rafa Sanz. El técnico cordobés deberá reinventar su perímetro con las bajas de Hill y Guillandeaux.

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