El equipo de Javi Rey lleva seis semanas sin conseguir una victoria y baja hasta la decimosegunda posición
Victoria cómoda y clara de un Rápido de Bouzas que, cada jornada, es un equipo que huele a claro candidato a la promoción de ascenso e, incluso, a alcanzar la Segunda División B. Los vigueses llevan una primera vuelta casi inmaculada que les mantiene en lo más alto de la tabla clasificatoria con 40 puntos y ocho de margen sobre el primer equipo fuera de los puestos de promoción.
Mientras, el Barco, sigue cada semana que pasa con su cuesta abajo, y les esta costando mucho aguantar el tipo en los partidos, con un equipo que llega muy justo física y mentalmente y que necesita como agua de mayo el parón navideño, para el que queda una jornada liguera.
Por su parte, los boucenses ofrece unos motivos para esgrimir esta afirmación tan simples como efectivos. En una escuadra sólida como una piedra en la parcela defensiva, como lo demuestra el hecho de que solamente llevan encajados ocho goles en las 18 jornadas disputadas, y dispone de capacidad para generar media docena de ocasiones de gol en cada encuentro, alguna de ellas, obtenidas por el hastío del rival.
Ayer en el Baltasar Pujales ante el Barco, la formación de Patxi Salinas se encerró en su campo para permitir ciertas combinaciones estériles de su rival, un equipo con buenas individualidades, pero que le faltó profundizar más, algo que aprovecharon los jugadores del Rápido para cazarles en las transiciones rápidas y también hacerles daño en el balón parado.
Lo hizo pasado el cuarto de hora de partido cuando Jesús Varela tiró una doble pared en banda y puso el esférico para el remate del madrileño Juanma Torres, logrando el 1-0.
Sentencia en la segunda parte
En la reanudación, el Rápido de Bouzas tuvo dos ocasiones más antes del segundo gol, pero la resolución llegó de penalti en el minuto 69, cuando el Barco, harto de intentar atacar y no generar peligro ante la efectividad de la defensa local, terminó desesperado. Penalti cometido por el defensa Óscar Loza sobre el delantero Tomás, que transformó Pablo Carnero.
Diz cerró la cuenta del líder para una victoria cómoda, clara y contundente de un Rápido de Bouzas que, cada semanas se reivindica como una opción fiable para disputar la promoción de ascenso y soñar con un ascenso a la división de bronce.
Mientras, el equipo de Javi Rey, está pagando muy caro los errores defensivos, y pasó de estar en una racha positiva, que le tuvo muchas jornadas sin perder, a entrar en una dinámica en la que los partidos se les están escapando en fallos puntuales que están condenándoles.
