Las dos caras del derbi entre Ourense CF y el Arenteiro

Rubén Domínguez y Javi Rey descuentan las horas para un derbi de categoría. El primero, entrenador de un Ourense CF que necesita los puntos para escapar de la “quema”. El segundo, técnico del CD Arenteiro, buscará certificar un ascenso que está cantado quizá aunque ni sumen en O Couto. Ambos analizaron el duelo y todo lo que supone en los micrófonos de “El Vestuario”, el podcast de La Región presentado por Pepe Garrote. “Con nuestra gente y la que llegue de Carballiño, va a haber un ambientazo para ver un duelo de dos equipos que se respetan y se conocen. A priori, veo un partido cerrado. Espero que ellos empiecen fuerte porque saben que si puntúan en O Couto son campeones. Es su primera bala. La primera vez que dependen de ellos. Nuestra gasolina no es la ilusión, es que nos jugamos la vida”, analiza Domínguez. Un diagnóstico que comparte su colega y rival. “También me espero un duelo muy igualado. Nosotros nos estamos jugando un ascenso y ellos la salvación. Va a ser clave el control de las emociones. La pasada jornada, en la segunda parte ante el Burgos Promesas, no estuvimos bien. Somos dos buenos equipos, trabajados. Espero un partido táctico, cerrado y de pocos goles”. No hay demasiados secretos a 28 kilómetros de distancia. “Aún así, en los vídeos siempre se ven detalles nuevos”, coinciden los preparadores, que no dejan nada a la improvisación. Quizá el empate sirva para cumplir un objetivo y dar un paso más hacia el otro. Pero ni Rubén Domínguez ni Javi Rey lo firman ahora mismo. “Mejor un 1-0 y que no gane el Avilés. Todos contentos”, pone sobre la mesa el primero. En la villa del Orcellón no recogen el guante. A día de hoy, no firmo el empate. Igual el domingo a las 18:30 horas te digo que sí. Es una pena que el derbi llegue justo ahora. Saldremos a ganar o empatar para ser campeones. Ojalá que el Ourense CF mantenga la categoría. Tenemos que respetar a los rivales y a la competición. Competir. Mi forma de ser no permite otra cosa”. Rubén Domíguez ve este derbi como una etapa más de un largo camino. “Creo que nos jugaremos la salvación en el último minuto de la última jornada. Partimos de esa base. Firmo llegar a ese momento dependiendo de nosotros mismos”. En el polo opuesto de la tabla, el ascenso del Arenteiro no es cuestión de sí o no, es cuestión de cuándo. “Les dije a los jugadores que el destino nos iba a permitir ascender en el campo”, explica Rey. Eso sí, el entrenador de los verdes no quiere ni escuchar hablar de fiesta o celebración. “Tuve una mala experiencia en el Barco. Podríamos ascender a falta de cinco jornadas. Recibíamos al Gondomar, que no se jugaba nada. El Concello anunció la ruta que iba a hacer el equipo en los festejos. Perdimos 2-4 y acabamos subiendo en el último partido”. El fútbol ourensano de más nivel se cita el domingo en O Couto. Un derbi para no perdérselo. Dos equipos, dos objetivos y dos entrenadores que ya estudian la forma de lograrlos.