El portugués Vítor Carvalho del Sistemas SS/Trevomar se impuso ayer en la llegada de la segunda etapa de la Vuelta a Galicia entre Sarria y Ourense de 143 kilómetros con un crono de tres horas 24 minutos 11 segundos, por delante de Óscar García-Casarrubios.
La segunda etapa de la Vuelta a Galicia se desarrolló bajo la igualdad que marcaban las clasificaciones en el comienzo de la jornada en Sarria. La vigilancia entre todos los corredores fue constante durante buena parte de los 143 kilómetros del recorrido.
Pero cuando parecía que todo abocaba a un sprint masivo como en la jornada anterior en tierras lucenses, apareció de nuevo el espíritu de lucha de Óscar García Casarrubios. Escapado buena parte de la primera etapa en la que se había tenido que rendir a pocos metros de la meta, esta vez el ciclista manchego del Froiz no parecía dispuesto a nadar para morir en la orilla.
Su salto a 40 kilómetros de la línea de meta acompañado del corredor portugués de La Trevo mar Vitor Carvalho se convirtió por fuerza y por tesón en la fuga buena de la jornada. Por delante todavía quedaba un alto de tercera categoría, el de Gundiás, que los dos fugados pasaron como si la carretera no se empinase hacia arriba. Y una vez llegados a ese punto, con una ventaja de más de dos minutos sobre el pelotón, solo quedaba apretar los dientes y descender asumiendo muchos riesgos hacia la ciudad de As Burgas.
En un sprint mano a mano entre Carvalho y García Casarrubios, el portugués se quedó con la etapa y el maillot negro de la regularidad. Para el manchego un premio tanto o más importante que el triunfo parcial. No sólo recibió el trofeo al ciclista, por el momento, más combativo de la Volta, sino que pudo celebrar, ante cientos de ourensanos, que hoy partirá hacia Moaña con el maillot amarillo de líder.
El Froiz ya tiene al primero de la general, y también al tercero, un ciclista de Mos que también puede presumir de ser el mejor gallego en la general: Óscar Bastos. En el punto intermedio del podium provisional de la Volta, el otro protagonista del día, el portugués Vitor Carballo.
Pablo Araújo Dos de los participantes en la etapa ourensana afrontan una cuesta ya en la ciudad.
