La Asamblea no dio luz respecto a la recogida del testigo del dimitido Consejo de Administración y confirmó que el club no interesa a los máximos accionistas
El Club Deportivo Ourense vivió ayer un episodio más de su desmembramiento. La asamblea general extraordinaria de accionistas, en segunda convocatoria después de no haber quorum en la cita del miércoles, no dio luz respecto a la recogida del testigo del dimitido Consejo de administración y confirmó que el club no interesa lo más mínimo a los máximos accionistas.
Primeramente tomó la palabra el vicepresidente en funciones, José Ramón Fernández Morgade, para constituir la asamblea. Si el día anterior estaba representado el 19,75 por ciento del capital social ayer fue el 23,15. Tampoco sería suficiente en primera instancia pero al tratarse de la segunda convocatoria no había impedimento alguno para desarrollar la asamblea si bien demuestra que la capacidad de convocatoria entre los máximos accionistas que tiene un club de 62 años de historia que transita camino de la disolución es más bien mínima al no estar representado ni la cuarta parte del capital social.
Fernández Morgade cedió la palabra a Alejandro Estévez, quien hizo un alegato de la gestión del grupo de trabajo que él dirigió y pidió disculpas por los errores realizados y justo antes de las votaciones Fernández Morgade puso en antecedentes respecto al proceso de dimisión y la convocatoria de la junta. La mayoría de los accionistas aceptaron la dimisión del Consejo en funciones. Después, nadie respondió de forma positiva a la pregunta de si alguien quería hacerse cargo de la gestión del CDO.
Llegado este punto ya sólo queda remitir al Juzgado los acuerdos tomados en la asamblea, incluidas las cuentas de la entidad, para que se proceda a la disolución de la sociedad. La asamblea decidió, únicamente con los votos en contra de una persona que acudía en representación de un accionista se mostró, que Alejandro Estévez sea la persona que protocolice los acuerdos adoptados ayer.
El siguiente paso
El Club Deportivo Ourense está un paso más cerca de la disolución. El siguiente paso después de la fallida asamblea de ayer, fallida al menos en lo que a la búsqueda de un referente en la gestión se refiere, pasaría por el Juzgado: "Ahora hay que comunicarle al Juzgado lo que aquí se decidió y como no hay nadie que quiera coger el club se produciría la disolución. Vamos a esperar unos días, hasta finales de mes, por si en ese periodo alguien se anima a coger el club, de la misma manera que hicimos nosotros hace un par de años en una situación similar".
