El Dépor se hace grande en Espiñedo frente al Arenteiro (1-2)

El Dépor se llevó la victoria por un gol a dos ante un Arenteiro que quiso pero no pudo pese a adelantarse en el marcador tras el gol de Miku

No pudo ser. Todo estaba preparado para ponerle el colofón al año 2023 con una gran noche ante el “trasatlántico” Deportivo de La Coruña, pero el Arenteiro y su afición, que llenó hasta los topes Espiñedo, se quedaron con la miel en los labios. Los coruñeses ganaron por dos goles a uno en un choque en el que fueron superiores al equipo de Javi Rey.

En los prolegómenos del encuentro se podía apreciar la dimensión del otrora Súper Dépor. Recordaba los enfrentamientos de Copa del Rey ante Valencia o Atlético de Madrid. En las taquillas se podía leer el folio que más gusta: entradas agotadas. El palco se quedó pequeño y las cabinas más de lo mismo. En las gradas, más de dos mil aficionados y porque no había más sitio. Sirva como dato, que las dos casas que están detrás de la portería, en la que los balcones se cotizaron a alto precio en los partidos coperos, ayer, pese  al frío, lucían un gran aspecto.

El partido prometía y no defraudó. La pena fue que el Deportivo mostró su mejor versión desde el principio. Avisó con un par de remates en los primeros diez minutos. El primero de Pablo Vázquez se marchó fuera, mismo camino que cogió el segundo de Yeremay. Pasados los dos sustos, una buena jugada de Pibe la finalizó Jordán Sánchez con un disparo que atajó bien Germán Parreño.

Gol del Arenteiro

A la media hora llegó la euforia a la grada local. Pablo Martínez comete un error de principiante en la salida de la pelota, Pibe, atento, la recupera y cede a Miku, que con un derechazo fusila al meta deportivista y pone el 1-0. De ahí al descanso poco más destacable, si acaso una falta directa que sacó Pibe y que despejo con apuros el meta blanquiazul.

Nunca se sabe lo que pasa en los vestuarios en el descanso, pero en el del Dépor no debió haber muy buen rollo y sí una buena reprimenda. Tanto que salieron antes de tiempo y tuvieron que esperar por el árbitro y el equipo verde.

Y cómo salieron, a morder. Desde la primera jugada parecían otros. En el minuto 56 ya empataron. Falta lateral, que saca Lucas Pérez y que remató Davo, tan cuestionado por su afición como efectivo ayer.

Lejos de bajar el pistón, aceleraron más todavía. En el 61 no hicieron el 1-2 de milagro, ya que tuvieron una triple ocasión. La primera, tras jugada de Yeremay, la evitó Diego García mandando a córner. Tras el saque de esquina, el remate de Pablo Vázquez lo vuelve a salvar Diego, otra vez a córner y en la tercera, José Ángel mandó fuera. Aún quedaba otra para Yeremay, el más desequilibrante de los visitantes, pero volvió a encontrarse con el meta verde.

En el 74 Luis Chacón obligó al meta coruñés a emplearse a fondo, y en el 78 el definitivo 1-2. David Mella se va por su banda, recorta, dispara, rechaza Diego y Davo, con una sutil vaselina marca. Era justo. Aún tuvo otra, Lucas Pérez sacó una falta al larguero. 

Al final, victoria justa de los deportivistas que salvaron la cabeza de Idiakez.

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