Doña Pepita tenía quitar a mano el barro de los pantalones en un tanque situado debajo de la tribuna de preferencia.
Doña Pepita fue, junto con Concha, las mujeres más fieles y fans de la historia del CD Orense. Con motivo de la muerte de doña Pepita en 1991, La Región publicaba una entrevista hecha dos años antes, en ella explicaba que en su vida y durante 40 años, lavó miles de camisetas, calcetines y pantalones de los jugadores del club. Al principio lo hacía a mano en un tanque situado debajo de la tribuna de preferencia y ayudada por su hijo Roque, más tarde masajista de los jugadores.
El presidente Docabo fue el primero que le compró una lavadora y más tarde el presidente Bermello le consiguió hasta tres. A pesar de las maquinas, doña Pepita tenía que quitar a mano el barro de los pantalones sobre todo cuando entrenaban en el Club Santo Domingo. En la entrevista, además de agradecida con todos los miembros del club, doña Pepita declaraba a Mario Guede el mejor entrenador del Orense y Nando Yosu el peor.
El presidente Vidal le regaló un reloj y el entrenador Negrillo una combinación. Su ilusión era que el Orense llegara a la Primera división. Nunca lo logró.
