Taranilla. Es raro que el portero ourensano sufra falta de concentración. Ya tuvo que emplearse a fondo en una falta que lanzó a los nueve minutos Michi respondiendo con una excelente intervención. Finalizando esa primera mitad volvió a lucirse a un disparo de Iago Aspas (2).
Josu. Jugó de lateral derecho y lo pasó bastante mal en la primera parte debido a que los interiores celestes subían muy sueltos. Por su parcela entró con frecuencia Iago Aspas, que centró desde ahí después del rechace de un saque de esquina para poner le el balón del gol a Michu (1).
Aloisio. Acaba de salir de una lesión y se nota que no está todavía al cien por cien. Se vio en una jugada a la que tuvo que salir a la banda en los primeros compases. Luego se mostró firme por arriba y sacó balones comprometidos. Fue relevado por Rives en el segundo tiempo (1).
Portela. Sigue manteniendo un papel muy regular. Marcó con seguridad e incluso se dejó caer hacia las bandas para taponar huecos. En el segundo periodo recibió un golpe. Segundos después fue relevado por Martín, no porque pidiese el cambio, sino porque Tomé pretendía meter un poco más de mordiente (2).
Tomás. Le tocó bailar con la más fea, Dani Abalo. El exterior derecho del Celta B, que siempre realiza contra el Ourense partidos muy completos, desbordó mucho en la primera mitad. En la segunda bajó y Tomás lo controló mucho mejor (1).
Jaime. Minuto 11. Jaime arranca con todo el campo para él, se mete en el área y no acierta a remachar una clara ocasión de gol. Le faltó la chispa de otras veces. Lo intentó, pero algo le pasa a este fino delantero (1).
Pablo. El Celta B introdujo superioridad numérica en el centro del campo y Pablo, uno de los jugadores más regulares del equipo, no se encontró cómodo. Admitió que acusó en exceso el partido de entre semana disputado el jueves en Noja (1).
Yebra. Otro de los que no estuvo nada fino. Se encontró en un terreno minado, con muchos rivales a su lado y sometiéndolo a una presión agobiante. Mejor en la segunda mitad, cuando ya pudo airear la parcela (1).
Lozano. Sufre mucho cuando se trata de entrar en el fútbol de cuerpo a cuerpo. Lo suyo es más bien tocar y controlar, mover el balón. Los rivales se le pegaron mucho y se topó con una presión de la que era difícil salir (1).
Osvaldo. Entró por Jaime. Lo mejor lo tuvo después de un centro de Moreno. Se revolvió bien, pero atajaron su avance (1).
Rives. Entró sustituyendo a Aloisio. Aportó mucha presencia en el campo, pues se sumó al ataque descaradamente en las jugadas de estrategia. En dos ocasiones remató a puerta (2).
Martín. Sustituó a Portela, se situó en el carril derecho, pero estuvo muy cerrado allí (1).
Aloisio. Acaba de salir de una lesión y se nota que no está todavía al cien por cien. Se vio en una jugada a la que tuvo que salir a la banda en los primeros compases. Luego se mostró firme por arriba y sacó balones comprometidos. Fue relevado por Rives en el segundo tiempo (1).
Portela. Sigue manteniendo un papel muy regular. Marcó con seguridad e incluso se dejó caer hacia las bandas para taponar huecos. En el segundo periodo recibió un golpe. Segundos después fue relevado por Martín, no porque pidiese el cambio, sino porque Tomé pretendía meter un poco más de mordiente (2).
Tomás. Le tocó bailar con la más fea, Dani Abalo. El exterior derecho del Celta B, que siempre realiza contra el Ourense partidos muy completos, desbordó mucho en la primera mitad. En la segunda bajó y Tomás lo controló mucho mejor (1).
Jaime. Minuto 11. Jaime arranca con todo el campo para él, se mete en el área y no acierta a remachar una clara ocasión de gol. Le faltó la chispa de otras veces. Lo intentó, pero algo le pasa a este fino delantero (1).
Pablo. El Celta B introdujo superioridad numérica en el centro del campo y Pablo, uno de los jugadores más regulares del equipo, no se encontró cómodo. Admitió que acusó en exceso el partido de entre semana disputado el jueves en Noja (1).
Yebra. Otro de los que no estuvo nada fino. Se encontró en un terreno minado, con muchos rivales a su lado y sometiéndolo a una presión agobiante. Mejor en la segunda mitad, cuando ya pudo airear la parcela (1).
Lozano. Sufre mucho cuando se trata de entrar en el fútbol de cuerpo a cuerpo. Lo suyo es más bien tocar y controlar, mover el balón. Los rivales se le pegaron mucho y se topó con una presión de la que era difícil salir (1).
Osvaldo. Entró por Jaime. Lo mejor lo tuvo después de un centro de Moreno. Se revolvió bien, pero atajaron su avance (1).
Rives. Entró sustituyendo a Aloisio. Aportó mucha presencia en el campo, pues se sumó al ataque descaradamente en las jugadas de estrategia. En dos ocasiones remató a puerta (2).
Martín. Sustituó a Portela, se situó en el carril derecho, pero estuvo muy cerrado allí (1).
