Una liga en los despachos

Las ligas para los equipos ourensanos han terminado. Con la salvedad del fútbol, que tiene a varios de sus equipos de Tercera y Preferente en plena efervescencia y luchando por permanencias y ascensos con más o menos opciones, son el resto de modalidades las que comienzan a perfilar el próximo curso tanto en la parcela deportiva como en los grandes visitados en el periodo estival, los despachos de federaciones y clubes. Ahora mismo son tres los equipos que aun habiendo descendido, pelearán de forma administrativa el continuar en la misma competición un año más. Ascensos, descensos, arrastres y renuncias de plaza han hecho que el CH Barrocás (hockey hierba), el Carnes do Ribeiro (balonmano) y el COB (baloncesto) estén en un periodo de impás tenso, a la espera de conocer si repetirán en la misma competición que la pasada campaña o por el contrario tendrán que pelear por el ascenso de categoría. Cierto es que ahora mismo las renuncias y problemas económicos acarreados por la pandemia del coronavirus hacen ser optimistas a los tres, pero también lo es que un año más el verano, en vez de en la playa y con el descanso propio de la época, comienza sentado en un despacho. El Barrocás, madrugador En el caso del equipo de hockey hierba, el desenlace al culebrón veraniego podría llegar en menos de diez días. El conjunto ourensano, que descendió a categoría autonómica tras una emocionante campaña en División de Honor B, está a la espera de las decisiones que se tomen en la Asamblea de la Federación el 18 de junio. Las opciones de conservar la plaza para los ourensanos pasan por que la máxima categoría continúe con 12 equipos (frente a los diez que se plantearon para la temporada 2021-2022), algo que quieren todos los clubes y que haría que solo hubiese un descenso frente a los tres actuales. Tan solo quedaría que esto se refrendase por unanimidad en la asamblea, en la que los equipos catalanes son mayoría y son los principales impulsores de esta iniciativa que daría más partidos y presencia a la competición. Al margen de eso, también es importante recordar que de cara a la expansión y consolidación del hockey hierba a la Federación Española le interesa tener equipos fuera del epicentro, que es la propia Cataluña. Un nuevo motivo para ser relativamente optimista. En su contra juega el bajo coste de la inscripción y canon para disputar la competición es bajo, por lo que ninguno de los equipos que logra plaza renuncia a ella (además de tener una sanción si lo hace, ya que antes de los partidos definitivos debe comunicar si va a querer una). El Ribeiro, por arrastre El caso del Carnes do Ribeiro es diferente, aunque con el mismo desenlace. El conjunto de Ribadavia, que firmó una temporada notable y concluyó la campaña en Primera División masculina en la zona media de la clasificación se vio condenado al descenso por el arrastre del Lalín, conjunto del que son filial a todos los efectos federativos. Al igual que el Barrocás, permanecen parados a la hora de conocer si el equipo pontevedrés se hará con una de las vacantes en la categoría perdida o de si son necesarios más clubes para completar uno de los seis grupos que componen la tercera categoría del balonmano nacional. Desde abajo, el Meaño ya ha confirmado que se hará con plaza conseguida desde categoría autonómica, por lo que de no darse ninguna de las posibilidades anteriores el Ribeiro disputaría la competición y buscaría continuar con la vinculación con el Lalín. La solución, menos ortodoxa que en el caso del Barrocás. En las próximas jornadas se comunicarán las vacantes y se recompondrán competiciones y calendarios, ahí es cuando el Ribeiro sabrá si repite en categoría nacional o debe pelear por por el ascenso en la cancha tal y como hicieron temporadas atrás. El COB, a la espera En el caso del Club Ourense Baloncesto las variables se multiplican. Tras el dramático descenso en la jornada final de liga frente al Murcia, el COB no ha dejado de moverse con el Lleida para intentar buscar una solución. En el caso de los catalanes parece que harán una permuta de plaza con el Barça B, que además le cedería jugadores. Esto dejaría una LEB Oro de 19 equipos, que bajo ningún concepto quieren los equipos. De esta forma, la opción de ampliar la competición a 24 y crear dos grupos como este curso gana fuerza y ahí los ourensanos obtendrían una de las vacantes. La decisión final se tomará el 2 de julio en la Asamblea de la FEB, aunque todas las partes cuentan con una solución al entuerto antes.