El Nogueira volvió a dejar muy claro ante el Polígono por qué es contundente el peso de la historia entre ambos jugando en A Tella. Una vez más, el cuadro afilador se impuso a su rival que solo pudo ganar dos veces en ese terreno, siendo la última en 2007.
La tarde se le abrió muy pronto a los locales mientras seguía llegando público al campo. Pablo Hermida ejecutó un saque de esquina desde el sector derecho y en la boca del área pequeña aparecieron tres camisetas blancas, una de ellas la de Veri, que se anticipó todos para conectar el balón y poner el madrugador 1-0. Los industriales no salían de su asombro, teniendo en cuenta que su defensa se caracteriza por su gran firmeza en las acciones a balón parado.
Los amarillos intentaron de alguna manera superar el mazazo recibido conducidos por David que dejó varios destellos de calidad, pero no gozaba del acompañamiento necesario a la hora de atacar, salvo la polémica acción dentro del área rival al ser empujado tras enviar un centro y que todos reclamaron como penalti. El árbitro hizo caso omiso a las protestas y la jugada pasó al olvido rápidamente.
El partido entró en una fase en la cual el Polígono tenía un poco más el control del balón, pero no terminaba de aclararse a la hora de atacar, mientras que el Nogueira vivía de la renta del gol y no se complicaba la vida. De todas maneras, el encuentro no despertó grandes pasiones entre el público, porque el juego estuvo en buena parte del primer tiempo muy cortado e impreciso, en parte por lo resbaladizo del terreno de juego.
La ocasión más nítida para los visitantes llegaría a cinco minutos de irse al descanso. Robo de Atiza combinando luego con Choupas que le dejó al balón servido a Viti cuya volea la acabó desviando Borja sobre el travesaño.
En la segunda parte, los anfitriones movieron piezas buscando con la entrada de Iago y Lois más profundidad. Precisamente Lois tuvo en sus botas la oportunidad, luego de que resbalara el portero y su disparo acabara marchándose cerca del palo derecho, aunque el árbitro otorgó un saque de esquina.
Más tarde, Bustelo le robó el esférico a un Juan desconocido y tras una buena asistencia a Iago, cuyo posterior remate lo repelió Rodri con ambas piernas. De seguido malogró una gran oportunidad Pablo Hermida, con una volea que se fue sobre el horizontal.
A partir de ahí, el Polígono arriesgó un poco más ante un Nogueira que supo resguardarse convenientemente y en qué momento podía explotar el contragolpe. Los locales le cedieron el terreno a su rival, que no encontraba la manera de poner en apuros a Borja.
A todo esto, los afiladores encontraron la llave para abrir la puerta del 2-0. Lois robó con mucha decisión y temple un balón en el medio campo y a pesar de irse con el cuero a trompicones supo mantener la vertical. Entró al área y resolvió con un tiro raso y ajustado al palo izquierdo. Tal y como venía desarrollándose el partido, fue la sentencia.
A partir de ahí fue un querer y no poder de un Polígono que perdió su condición de invicto a domicilio en un terreno gafado.