La cuarta etapa confirma al equipo ourensano que el pequeño utilitario de Seat es de piedra
El planning de la Panda Raid avisaba de la espectacularidad de la cuarta etapa y, como no, cumplió los pronósticos.
Ya en el campamento de Mrhimina tras casi 400 kilómetros y después de descubrir las trialeras de Marruecos, los expedicionarios ourensanos Jano Fraga y Jesús Miguel Varela se enamoran cada vez más del pequeño utilitario y del espectacular paisaje del país.
"Nuestro concepto sobre el Seat Panda va cambiando cada día. En la vida pensé que un coche como este pueda hacer las cosas que le obligamos a hacer. Sube por donde sea, baja por donde queremos, es espectacular, ¡Qué coche!", afirma con emoción en sus palabras Jano.
Por su parte Jesús sigue añadiendo fotogramas del paisaje a su memoria, eso sí, con cierto agobio por los problemas con la gasolina. "Creo que casi se nos funde la luz de la reserva de la cantidad de tiempo que la llevamos encendida. Llegamos al repostaje muy justos pero la tensión pasa a un segundo plano cuando te paras en la etapa a mirar durante unos minutos los valles entre las montañas".
La otra pareja presente, la formada por Rogelio y Eva siguen adelante con nota. "Lo están haciendo genial, forman un muy buen equipo y son uno de los equipos más competitivos", destaca Jano.
Para hoy, los participantes se enfrentarán a 413 kilómetros de etapa, con un complicado río de arena de 800 metros y varias trampas.
