El colorido y el gran ambiente vivido este domingo en el campo de O Marco dejó con un mal sabor de boca a los aficionados y especialmente a los jugadores del Peroxa y Allariz a los que el empate a un gol le supo como una tragedia, ya que a falta de una jornada para acabar la fase de ascenso, este resultado le abrió las puertas al Antela que dependerá de sí mismo para lograr el anhelado ascenso a la Preferente.
La gran novedad en la alineación de los locales fue que Iván Alonso se decantó por el jugador Maside para ser el portero titular en detrimento del juvenil Toño. El futbolista realmente no desentonó y transmitió en todo momento serenidad a los suyos.
El Peroxa pudo adelantarse por medio de Bruno, pero salvaría oportunamente Gavilanes. El partido no tenía un dominar claro y a pesar de que Óliver no pudo seguir por unas molestias, fueron los locales quienes generaron más ocasiones ante un rival que ofensivamente no tenía la pegada de otras tardes.
La estrategia fue la fórmula empleada por el equipo de Iván Alonso y cerca estuvo Portu de abrir la lata, pero su remate se desvió en un defensor. Más tarde, un cabezazo forzado de Cachito se fue apenas desviado sobre el larguero. Antes del descanso probó Juanma con una falta directa que se perdió cerca del palo izquierdo.
En el arranque del segundo tiempo apareció Pepe, que sin dudarlo, probó puntería y su disparo ajustado al palo derecho superó la estirada de Jhonny para poner el 1-0 ante el desconsuelo de los visitantes.
El Allariz estaba obligado a la remontada si pretendía conservar la plaza de ascenso y en ese empuje Juanjo derribó a Iker dentro del área. El propio jugador alaricano ejecutó el penalti, que con un gran estirada desviaba Maside ante el asombro de los presentes. Lejos de desmoronar esta situación al equipo de Miguel Sotelo, Veloso colgó un centro al área que con un medido cabezazo Víctor Gallego alojó el esférico junto al palo izquierdo, siendo estéril el intento de despejar de Maside y de esa manera lograr el 1-1, que daría paso a más de media hora para romper la igualdad.
NERVIOS Y POCO ACIERTO
El encuentro entró en una fase donde el balón no tuvo un dueño absoluto y donde las prisas le quitaban claridad a los alaricanos. El Peroxa apostaba a las faltas de Juanma y en una de ellas Bruno exigió a Jhonny que con la cruceta evitaron la caída.
Los minutos se iban evaporando y un mal despeje de Abel Fernández lo salvó sobre la línea Maside cuando se cantaba el gol.
