Envialia y Burgas se ven las caras el sábado con las de Chipi lamiendo las heridas del primer traspiés y las de Codeso en el mejor momento del curso
El fútbol sala femenino ourensano vuelve a acaparar el protagonismo de la Primera división. Y es que el sábado se reparte la primera ración del derbi. Sí, regresa a escena el Envialia-Burgas. La cita, desde las 18,30 horas en la cancha central de Os Remedios.
La cita llega con las de Chipi lamiendo todavía las heridas de la primera derrota de la temporada (1-0 en Burela), y las de Manolo Codeso lanzadas después de alcanzar la cuarta victoria liguera consecutiva (3-1 al Poio). Con todo ello, las blanquinegras son quintas con 18 puntos y ya solo un puesto y tres puntos por detrás están las blanquiverdes.
"Es la fiesta del fútbol sala ourensano, llega otro derbi. Trataremos de hacerlo lo mejor posible y sobre todo disfrutarlo en la pista ya que el año pasado no pudimos hacerlo", subraya Chipi, entrenador del equipo que el sábado actuará como local.
"Es el partido más deseado por todo el mundo en la ciudad, el partido que todas las jugadoras quieren disputar. Trataremos de ganar pero sobre todo disfrutar ya que llegamos en un momento muy bueno y la situación nos da mucha confianza. En todo caso la presión será para ellas que tenían pensado en luchar por los primeros puestos y después de perder en Burela están obligadas a ganar", subraya Manolo Codeso, entrenador del Burgas.
Ambos equipos tratarán de saldar viejas deudas. El Envialia ganó la Copa Galicia ante el Burgas el pasado mes de marzo, pero apenas un par de meses después el triunfo de las de Codeso en la penúltima jornada de liga dejó fuera de la Copa de España a las de Chipi.
"Tiramos las opciones de Copa de España ante ellas en aquel partido, después jugábamos contra el Atlético en su casa y ellas se estaban jugando el título de liga", remarca Chipi.
"Llegada esta situación me preocupa más el hecho de tratar de mantener el nivel de juego que el hecho de ganar por la necesidad de los puntos, si bien haremos todo lo posible por ganar. La confianza en este equipo es plena", añade Manolo Codeso.
Un derbi siempre es un derbi y en este caso lo es un poquito más porque la cita promete emociones fuertes con ambos equipos en la zona media alta de la clasificación: quintas unas, sextas las otras.
Cambio de metas
Con el Atlético sin hacer concesiones (nueve victorias en nueve partidos), con la derrota del sábado en el polideportivo Vista Alegre de Burela el Envialia se echa a un lado en la lucha por el título: "Con nueve puntos de desventaja hay que dar por finiquitadas nuestras opciones. Haremos todo lo posible por llegar a lo más alto posible pero hay que ser realistas y si la pasada temporada las madrileñas fueron subcampeonas perdiendo en toda la competición ocho puntos y nosotras ya perdimos nueve cuando faltan 21 partidos de liga... Nuestras opciones pasaban por ganar en Burela y mantener o acortar la distancia tras el partido con Alcorcón. En estos momentos toca ponerse a mejorar la quinta plaza del curso pasado".
El Burgas también puede cambiar objetivos. El de partida era la permanencia y a medida que avanza el curso las metas podrían ser más ambiciosas: "Lo importante es seguir mostrando este nivel y sobre todo trabajar con tranquilidad, que es lo que nos permitirá seguir creciendo como equipo, y en la segunda vuelta podremos probar cosas nuevas y tal vez luchar por cotas más altas", cerró Codeso.
DECLARACIONES
Chipi
Sensaciones contrapuestas para Chipi, técnico del Envialia, tras la derrota del sábado. "Finalicé con peores sensaciones de las que tengo ahora que volví a ver el partido. El desgaste y el control fue nuestro pero tuvimos dos problemas, uno en la finalización y otro en la estrategia, pero sin duda después de analizarlo con calma tengo claro que ante Burela volvería a jugar igual. Nos costó defender a Dany pero tuvimos más opciones".
Codeso
El entrenador del Burgas se manifiesta "muy contento, el trabajo que venimos realizando desde hace tanto tiempo empieza a verse con la competitividad de un equipo tan joven. Veo al equipo mandando, confiado, sabiendo lo que quiere, y ante el Poio el sábado vi un gran partido, soñaba con alcanzar ese nivel pero no a estas alturas". Alcanzado este extremo, Manolo Codeso ya solo piensa en "continuar creciendo".
