Alba Vargas, nacida en Sevilla pero criada en las Islas Baleares, fue el segundo fichaje del nuevo proyecto del Pabellón Ourense en la Liga Femenina 2.
Su experiencia en el Sòller de la máxima categoría nacional sumada a su enorme polivalencia fueron los factores determinantes a la hora de ficharla, aunque hasta el momento 'no me siento satisfecha con mi rendimiento en la cancha. Creo que puedo darle mucho más al equipo y no me están saliendo las cosas demasiado bien. Los dos últimos partidos ya estuve un poco más entonada y creo que puedo ir aportando cada vez más. Es cuestión de coger la dinámica de juego correcta', destaca la alapívot de 23 años.
Ciudad desconocida, grupo nuevo de competición y una plantilla diferente a lo que estaba acostumbrada, muchos cambios y poco tiempo para asimilar. 'Nunca había jugado en el grupo A de la Liga y es un cambio fuerte. Eso sí, estoy muy a gusto en la ciudad a pesar del frío', afirma entre risas la menorquina
Las primeras jornadas de la competición trajeron resultados inesperados para la joven plantilla del Pabellón ya que 'perdimos partidos que no contábamos. La falta de acoplamiento en el equipo es patente. Nosotras lo vemos cuando jugamos y la gente que viene a vernos también. Tenemos que trabajar todas en la misma dirección y asumir los roles que tenemos en el equipo, desde el cuerpo técnico a la última de las jugadoras. No podemos vivir de individualismos y sí debemos sacar un poco más el carácter que tenemos dentro'.
Las navidades marcarán el final de la primera vuelta en la Liga Femenina 2 pero antes el Pabellón deberá enfrentarse al Cáceres, Feel Cortegada de Vilagarcía de Arousa y al Ensino de Lugo, los tres situados en la parte alta de la tabla. 'Van a ser tres partidos complicadísimos pero tengo claro que tenemos que sumar una victoria por lo menos. Dos de los partidos son en casa, por lo que tendremos muchas más opciones. Eso sí, debemos mejorar los inicios de partido y la consistencia en el juego para ser competitivas. Ahí está la clave', finaliza Vargas.
Ciudad desconocida, grupo nuevo de competición y una plantilla diferente a lo que estaba acostumbrada, muchos cambios y poco tiempo para asimilar. 'Nunca había jugado en el grupo A de la Liga y es un cambio fuerte. Eso sí, estoy muy a gusto en la ciudad a pesar del frío', afirma entre risas la menorquina
Las primeras jornadas de la competición trajeron resultados inesperados para la joven plantilla del Pabellón ya que 'perdimos partidos que no contábamos. La falta de acoplamiento en el equipo es patente. Nosotras lo vemos cuando jugamos y la gente que viene a vernos también. Tenemos que trabajar todas en la misma dirección y asumir los roles que tenemos en el equipo, desde el cuerpo técnico a la última de las jugadoras. No podemos vivir de individualismos y sí debemos sacar un poco más el carácter que tenemos dentro'.
Las navidades marcarán el final de la primera vuelta en la Liga Femenina 2 pero antes el Pabellón deberá enfrentarse al Cáceres, Feel Cortegada de Vilagarcía de Arousa y al Ensino de Lugo, los tres situados en la parte alta de la tabla. 'Van a ser tres partidos complicadísimos pero tengo claro que tenemos que sumar una victoria por lo menos. Dos de los partidos son en casa, por lo que tendremos muchas más opciones. Eso sí, debemos mejorar los inicios de partido y la consistencia en el juego para ser competitivas. Ahí está la clave', finaliza Vargas.
