El Ribeiro Rodosa no falló en el Municipal de Redondela, donde firmó ante el SAR (22-31) la cuarta victoria consecutiva, sexta en lo que va de campeonato, lo que le permite seguir en el grupo de tres equipos que se mueve a un solo punto del líder Carballal en la Primera Nacional de balonmano.
El partido comenzó igualado, con ventajas mínimas para los ourensanos, aunque desde el momento que mejoró en la portería y afinó el acierto el ataque comenzó a poner tierra de por medio ante un rival que notó las bajas y que poco a poco fue cediendo hasta llegar a los 15 minutos finales prácticamente sin opciones y con una desventaja que se quedó al final en nueve goles.
“El partido fue dentro del guión. Con sus bajas por lesiones y por ser filial del Cisne, la idea era mentener un ritmo alto de partido para ir desgastándolos. Salimos muy metidos, aunque Anxo no empezó del todo acertado y después del cambio en el minuto 6 Cerviño aportó en portería. El trabajo táctico fue bueno en el arranque, pero fallamos en los últimos metros y nos costó coger ventaja”, destacó el técnico Félix Mojón.
Una vez ajustada la portería y mejorado el porcentaje de lanzamiento, el Ribeiro cogió una ventaja de siete goles que le permitió afrontar las rotaciones con mucha tranquilidad. Los locales lograronrecortar hasta el 10-14 al descanso, pero el partido estaba en el lugar que querían los de O Ribeiro.
En la segunda parte llegó el resto. La mejoría de los visitantes en defensa posibilitó una continuación muy plácida. La ventaja fue creciendo, entrando en los 10 minutos finales seis goles arriba. Con la portería acertada, una buena circulación y el acierto en las contras, el SAR se quedó sin opciones. Al final, 22-31, en la cuarta victoria consecutiva, que le mantiene en la segunda plaza.
Ahora, “toca pensar en el partido con el Ingenio. Estamos con mucha tranquilidad y buscaremos una victoria que nos permita asentar definitivamente el objetivo de la permanencia y, después, ver si somos capaces de mirar más arriba”.
