De todo, como en botica. En la División de Honor femenina, el Ponte no pudo imponerse al Gironella y se aleja del objetivo de la Copa; en la Primera A, el Carballiño vencía por la mínima y mantiene su objetivo, y en Primera B, dos derrotas amargas para Ourense, que pecó de ambición, y Coinasa, que recibió un excesivo castigo.
Jornada variada, en cuanto a resultados, para los equipos ourensanos que militan en las distintas categorías del fútbol sala nacional. En la División de Honor femenina, el Ponte firmaba un empate (3-3) con el Gironella, que mantiene vivo el espíritu de las de Morenín en su feudo de Os Remedios, pero aleja al Ponte del objetivo de la Copa, que era de uno de los anhelos de las de Plácido Díaz esta campaña -aunque el principal y prioritario es mantener la categoría en esta primera temporada en División de Honor-.
Con respecto a este último objetivo, el Ponte se sitúa décimo con 10 puntos y a cuatro de la zona de descenso.
Mejor sabor de boca dejó el 2-1 cosechado por el Carballiño en la Primera A de fútbol sala masculino. El Puertas Deyma era un rival difícil, nada asequible para un equipo como el de Colmenero que suple sus carencias con un plus de esfuerzo y derroche físico en el campo. Después de hacer lo más difícil, ponerse por delante en el marcador, el Carballiño siguió al pie de la letra las consignas de su entrenador y cerró filas en torno a su portero, haciendo estériles los esfuerzos de la joven plantilla del Puertas Deyma. El resultado permite a los de Colmenero mantenerse en los números deseados de cara a lograr el objetivo de este año, que al contrario que otras campañas se limita a mantener la categoría -los recortes mandan-.
Totalmente distinta la lectura en la Primera B masculina, donde el Ourense caía por 6-5 frente al Trabada, en un partido en el que los de Baliñas se llegaban a poner por delante, y que cuando se vieron con el empate en el marcador se lanzaron a por el partido... y perdieron.
Bien distinto pero con igual resultado lo vivido por el Coinasa B en la misma categoría. Los de Quique García perdieron 7-1 frente al Bueu y son colistas con dos puntos, aunque confían en despertar y dar una sorpresa, que podría surgir en el próximo encuentro liguero frente al Gondomar, un rival directo.
Con respecto a este último objetivo, el Ponte se sitúa décimo con 10 puntos y a cuatro de la zona de descenso.
Mejor sabor de boca dejó el 2-1 cosechado por el Carballiño en la Primera A de fútbol sala masculino. El Puertas Deyma era un rival difícil, nada asequible para un equipo como el de Colmenero que suple sus carencias con un plus de esfuerzo y derroche físico en el campo. Después de hacer lo más difícil, ponerse por delante en el marcador, el Carballiño siguió al pie de la letra las consignas de su entrenador y cerró filas en torno a su portero, haciendo estériles los esfuerzos de la joven plantilla del Puertas Deyma. El resultado permite a los de Colmenero mantenerse en los números deseados de cara a lograr el objetivo de este año, que al contrario que otras campañas se limita a mantener la categoría -los recortes mandan-.
Totalmente distinta la lectura en la Primera B masculina, donde el Ourense caía por 6-5 frente al Trabada, en un partido en el que los de Baliñas se llegaban a poner por delante, y que cuando se vieron con el empate en el marcador se lanzaron a por el partido... y perdieron.
Bien distinto pero con igual resultado lo vivido por el Coinasa B en la misma categoría. Los de Quique García perdieron 7-1 frente al Bueu y son colistas con dos puntos, aunque confían en despertar y dar una sorpresa, que podría surgir en el próximo encuentro liguero frente al Gondomar, un rival directo.
