Pese a ser superior, la UD Ourense no pudo pasar del empate ante un Viveiro efectivo
Tarde soleada y fría en O Couto que respetó el espectáculo, después de una semana muy complicada en lo climatológico. La UD Ourense y Viveiro llegaban a la cita con el objetivo de ganar y seguir enganchados a la zona noble. No lo consiguieron. Las ganas superarían al juego desplegado, en una primera parte en la que apenas las dos áreas se inquietaron y en la que a los equipos les costó meterse en el partido.
En el minuto 15, el equipo rojillo salió un poco del letargo, en un disparo desde el vértice izquierdo de Joni al que respondía Casillas enviándola a córner. En el 20, unas posibles manos que rebañaron desde el suelo una incursión en el área de Joni se reclamaron tímidamente como penalti. Eran los únicos atisbos de peligro de un conjunto local al que le costaba crear peligro y generar juego y en la que incluso dos despistes en forma de cesión al portero y de perdida en la medular, crearon incertidumbre en el aficionado.
Gol visitante
Una incertidumbre que se volvió zozobra cuando en el minuto 27, y tras un aviso de Sané que se iba desviado, llegaría el primer gol del partido. El mismo protagonista se interna por la derecha, pasa atrás a Sergio que dispara y tras tocar en un defensor el balón sale rebotado a la red. Era el 0-1 en el único tiro entre los tres palos del conjunto visitante en todo el partido.
Antes del descanso, Varo fue el que más cerca estuvo de la igualdada con una UD Ourense que aunque tardaría en reaccionar al gol visitante, fue incrementando su ritmo. Éste, cogería velocidad de crucero en la segunda con el cambio de Antón por Amaya que les dio más mordiente ofensiva.
Joni dio el primer aviso a la salida de un córner. Jose la mandaba por encima del larguero en el 58. El equipo de Jorge de Dios, cada vez arrinconaba más al rival y generaba más peligro. El fruto a estos minutos intensos llegaría en el 67, cuando Álex conectaba desde la izquierda con el de Carballeda y este de tacón la mandaba a dormir.
Tras la igualada el guion no cambió y los rojillos siguieron en busca del gol que le diese los tres puntos. En el minuto81, Osian daba ideas nuevas a la medular y ocupaba el puesto de Champi. En el epílogo y cuando desde la grada aún se reclamaba un posible penalti a Villa y los escasos tres de descuento, nuevamente Joni, tuvo la más clara encontrando la madera de la portería visitante.
La no victoria se sigue haciendo de rogar en un equipo abonado al empate.
