Lewis Hamilton (McLaren) se adjudicó el GP de Estados Unidos de Fórmula 1 por delante del alemán Sebastian Vettel (Red Bull) y del español Fernando Alonso (Ferrari), que se jugarán el título el domingo en Sao Paulo (Brasil).
Hamilton, campeón del mundo en 2008, firmó el cuarto triunfo de la temporada en el recién estrenado circuito de las Américas, en Austin (Texas), donde Vettel aumentó a 13 puntos su ventaja sobre Alonso, que sin embargo salvó la primera 'bola de partido' en un Mundial que decidirá el domingo que viene el circuito de Interlagos.
Hamilton perdió un puesto en la salida, cediéndole el segundo al Red Bull del australiano Webber, que se colocó justo detrás de Vettel.
Alonso salió séptimo, al ganar un puesto por la sanción de cinco que sufrió Massa al haber sustituido la caja de cambios de su Ferrari. No dudó en arriesgar y en los primeros compases, con una curva ciega a la izquierda tras una fuerte subida, avanzó tres puestos al superar a Michael Schumacher, Nico Huelkenberg y Kimi Raikkonen.
Hamilton recuperó la segunda plaza al adelantar a Webber en la quinta vuelta y se lanzó a la caza de Vettel. En el mismo giro en el que el australiano se retiró, por problemas en el alternador, cediéndole la tercera plaza a Alonso.
Hamilton presionaba marcando vueltas rápidas y en el giro 42 superó a Vettel. El alemán no ganó pero salió de Estados Unidos sabiendo que será campeón con un cuarto puesto en Brasil. Asimismo, para que Alonso ganase el título tendría que subir a lo alto del podio y que Vettel no mejorase un quinto puesto; ser segundo y que el alemán no supere la octava plaza; o acabar tercero y que Vettel no supere el décimo.
'NO NOS VAMOS A RENDIR'
'Perder tres puntos con respecto a Sebastian (Vettel) en un fin de semana en el que no íbamos rápidos y ellos prácticamente volaban es algo positivo. Llegamos a Brasil con todas las posibilidades del mundo. Vamos a pensar que todavía es posible. Ganaremos, perderemos, pero no nos vamos a rendir hasta la bandera a cuadros', adelantó Alonso.
Hamilton perdió un puesto en la salida, cediéndole el segundo al Red Bull del australiano Webber, que se colocó justo detrás de Vettel.
Alonso salió séptimo, al ganar un puesto por la sanción de cinco que sufrió Massa al haber sustituido la caja de cambios de su Ferrari. No dudó en arriesgar y en los primeros compases, con una curva ciega a la izquierda tras una fuerte subida, avanzó tres puestos al superar a Michael Schumacher, Nico Huelkenberg y Kimi Raikkonen.
Hamilton recuperó la segunda plaza al adelantar a Webber en la quinta vuelta y se lanzó a la caza de Vettel. En el mismo giro en el que el australiano se retiró, por problemas en el alternador, cediéndole la tercera plaza a Alonso.
Hamilton presionaba marcando vueltas rápidas y en el giro 42 superó a Vettel. El alemán no ganó pero salió de Estados Unidos sabiendo que será campeón con un cuarto puesto en Brasil. Asimismo, para que Alonso ganase el título tendría que subir a lo alto del podio y que Vettel no mejorase un quinto puesto; ser segundo y que el alemán no supere la octava plaza; o acabar tercero y que Vettel no supere el décimo.
'NO NOS VAMOS A RENDIR'
'Perder tres puntos con respecto a Sebastian (Vettel) en un fin de semana en el que no íbamos rápidos y ellos prácticamente volaban es algo positivo. Llegamos a Brasil con todas las posibilidades del mundo. Vamos a pensar que todavía es posible. Ganaremos, perderemos, pero no nos vamos a rendir hasta la bandera a cuadros', adelantó Alonso.
