El equipo malacitano necesita remontar el 1-0 de la ida en Porto para acceder por primera vez a los cuartos de final

Cita histórica del Málaga

Pellegrini charla con los jugadores: Weligton, Julio Baptista y Duda, durante el entreno. (Foto: JORGE ZAPATA)
El Málaga disputará el partido más importante de su historia ante el Oporto, vuelta de los octavos de final de la Liga de Campeones, y deberá remontar el 1-0 encajado en la ciudad portuguesa para acceder a los cuartos, en su primera comparecencia en la competición europea.
El equipo malagueño, que solo ha conseguido un gol en los últimos cuatros partidos, uno de la Liga de Campeones y tres en la Liga española, tiene ante sí el reto de superar al conjunto portugués, con el que inició esta racha negativa.

La plantilla malaguista apela al ejercicio de superación y al apoyo incondicional de la afición que llenará La Rosaleda con más de 30.000 espectadores para poner, al menos, en aprietos a un Oporto más experimentado y con excelentes jugadores, además de ser un equipo muy físico y técnico.

La novedad más importante en el Málaga es la incorporación de Baptista, recuperado de una lesión muscular, aunque finalmente son bajas los centrocampistas, el portugués Eliseu Pereira, y Francisco Portillo, que han tenido diversas lesiones.

El vigente campeón luso se presenta como un equipo cohesionado y con experiencia en estas lides europeas y recupera para este duelo a una de sus estrellas: el centrocampista portugués Joao Moutinho, autor del tanto del primer partido, ya mejorado de una lesión muscular en su pierna derecha.

En la parcela ofensiva, a la clase de James Rodríguez y la clarividencia de Moutinho, se le suman la puntería del colombiano Jackson Martínez, con 28 goles en 32 partidos oficiales esta temporada, y el despliegue físico de sus dos laterales, Danilo y Álex Sandro.

LA ROSALEDA, 20,45 H.

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