Sueños de Olimpia

Desde Filípides a Kipchoge, se llama Maratón

Últimos metros antes de batir el récord del mundo de maratón de Eliud Kipchoge.
photo_camera Últimos metros antes de batir el récord del mundo de maratón de Eliud Kipchoge.
Realidad o leyenda, el movimiento olímpico convirtió esta distancia -fijada en 42 kilómetros y 195 metros- en una de las pruebas estrella de los Juegos.

Heródoto dejó escrito que un correo ateniense llamado Filípides, recorrió los 246 kilómetros entre Atenas y Esparta para pedir ayuda ante el ataque de los persas en Maratón (490 a.C.).

El escritor Luciano de Samósata, en cambio, atribuyó a Filípides la carrera de 40 kilómetros entre Maratón y Atenas para anunciar la victoria ateniense. "¡Alegraos, vencimos!" dijo. Después cayó fulminado por el esfuerzo.

Realidad o leyenda, el movimiento olímpico convirtió esta distancia -fijada en 42 kilómetros y 195 metros- en una de las pruebas estrella de los Juegos. Un canto a la capacidad de resistencia y a la voluntad del ser humano.

En los últimos años, el afán de muchos atletas, además de ganarla, fue hacerlo con una marca inferior a las dos horas. El keniata Eliud Kipchoge lo logró el mes pasado.

12 de octubre. Viena. 1hora, 59 minutos y 40 segundos. A una media de 21 kilómetros por hora. Un récord no admitido por la Federación Internacional al incumplir sus requisitos.

No fue una carrera oficial. Fue un proyecto financiado por el magnate petroquímico Jim Ratcliffe con 12 millones de euros. En un circuito especialmente diseñado y estudiado, en un día perfecto -temperatura entre 7 y 14 grados- con la ayuda de un láser que marcaba el ritmo y la escolta de 41 gregarios. ¡Y vaya grerarios! Bernadr Lagat, Matthew Centrowitz, Paul Chelimo, Jacob Kiplimo, los hermanos Ingebrigtsen... Cinco en cabeza, cortando el viento, dos por detrás.

Cuatro asistentes en bicicleta, zapatillas Nike especiales y no homologadas... Demasiadas ayudas para que la IAAF lo admita. Eso no resta mérito a la proeza de este atleta colosal de sólo 52 kilos.


A Nirmal Purja ya no le queda otro 'ochomil'

Nirmal Purja alpinista

El alpinista nepalí Nirmal Purja, exmiembro de los grupos de elite de los 'gurkhas' y de la 'Royal Marine' británica; logró, a sus 36 años completar el 'proyecto 14/7'. Ascender las 14 montañas más altas del mundo -las de más de 8.000 metros- en un plazo no superior a siete meses.

Purja lo logró en seis meses y seis días. Hubiesen sido menos de no mediar problemas burocráticos. En ese tiempo coronó, por este orden, el Annapurna, Dhaulagiri, Kanchenjunga, Everest, Lhotse, Makala, Nanga Parbat, Gasherbrum I y II, K2, Broad Peak, Cho Oyu, Manaslu y Shishapangma.

Esta proeza suscitó las críticas de otros compañeros, sobre todo por las formas. Para los puristas, escalar con oxígeno, por las caras "sencillas", con cuerdas fijas, con la ayuda de sherpas -32 compañeros en el primer ascenso- o emplear helicópteros para ganar tiempo en los desplazamientos entre objetivos son un insulto al noble espíritu del alpinismo.

Siendo el récord el primer y claro objetivo de Purja, algunos olvidan que lo abandonó dos veces para participar en dos rescates de otros montañeros. Que sufrió condiciones durísimas en varias de las expediciones y que esperó pacientemente en Pakistán varias semanas hasta disponer de financiación para seguir el reto. También denunció con una foto -decenas de personas haciendo cola antes de la cumbre- la salvaje explotación comercial del Everest.

Purista o no, romántico o interesado. Para los mortales, como quien esto escribe, cualquiera de los 'ochomiles' logrados por este miembro de la Orden del Imperio Británico ya supone un mérito extraordinario. Sí, quizá no había necesidad de tanta prisa. Además, ¿qué le queda ahora por escalar?


Citius, altius, fortius

Los Juegos cuestan 60 millones

El Comité Olímpico Internacional vendió los derechos de retransmisión de los próximos Juegos de verano e invierno, hasta el año 2024, por 1.300 millones de euros a 'Discovery Communications', propietaria de canales como 'Eurosport'. En España, este acontecimiento deportivo era casi patrimonio de la cadena pública, RTVE, cada vez más ahogada por las deudas. El caso es que el ente trabaja todavía con los presupuestos de 2018 y necesita unos 60 millones extra, nada menos, para adquirir los derechos y cubrir la inminente cita de Tokio. Un despilfarro que la alegre Ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha garantizado públicamente.

Subirán los impuestos, retirarán el diésel, pero los españoles no nos vamos a quedar sin los Juegos en abierto. Podemos dormir tranquilos. La administradora Rosa María Mateo debería explicar la gestión de los más de 376 millones anuales que recibe del dinero público para mantener una plantilla de 6.500 empleados. Y la ministra Montero -con quien nada tengo que ver- cuáles son las preferencias del gobierno.    


Ver o leer

Correr por la libertad

Poco se ha escrito o rodado sobre un héroe deportivo de la talla del checo Emil Zátopek (1922-2000) el único en ganar las pruebas de 5.000, 10.000 metros y la Maratón en los Juegos de Helsinki 1952. Impresionante antes e impensable hoy. Zátopek quizá encontró en el acto de correr una metafórica salida a la represión del régimen comunista de su país. Fue degradado de coronel a barrendero, aunque reza la leyenda que cada vecino de Praga barría su puerta por respeto a la 'locomotora humana'. Libro ilustrado para coleccionistas. 

‘ZÁTOPEK’, Jan Nóvak y Jaromir 99. (Aloha!) 216  páginas.


Bla, bla y bla

"Estuve en la luna y regresé, los últimos treinta segundos de carrera fueron el mejor momento de mi vida" - Eliud Kipchoge (atleta keniata)

"Dejé casa, trabajo y pensión por el reto; muchos se rieron de mí pero demostré que todo es posible con determinación" - Nirmal Purja (alpinista nepalí)

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