El guardameta cerró este viernes casi definitivamente la puerta de entrada a los equipos blancos tras renovar hasta 2019 con el United
David de Gea, rojiblanco casi desde sus inicios, ídolo del Atlético de Madrid entre 2009 y 2011, portero titular del Manchester United desde hace cuatro años, cerró hoy casi definitivamente la puerta de entrada al Real Madrid tras renovar hasta 2019 con el club inglés.
El anuncio oficial de "los diablos rojos" en su página web acabó con el sueño de Florentino Pérez, presidente madridista.
La salida del club de Iker Casillas del club blanco con destino al Oporto permitía abordar el fichaje de un guardameta joven y con experiencia para sustituir al mito del Real Madrid. Al final, ese sueño no se consolidó tras un final algo grotesco del que, según Florentino Pérez, tuvo la culpa el Manchester United.
El Real Madrid argumenta que por dos minutos, los que se retrasó la entidad inglesa en enviar los datos al Sistema de Correlación de Transferencias (TMS, una herramienta virtual a través de la cual los clubes de todo el mundo pueden llevar a cabo sus transferencias), De Gea no fichó por el club blanco. Con el mercado cerrado, su ilusión por cambiar de aires se evaporó.
Keylor Navas, que ya tenía las maletas hechas para irse al United, será esta temporada el portero titular del cuadro de Rafael Benítez, que este viernes dio por zanjado el asunto: "Es sencillo. De David de Gea no tengo nada que decir. No es futbolista del Madrid en este momento y solo hablo de los futbolistas que tengo", sentenció.
Lejos en el tiempo queda una carrera que De Gea inició a los cuatro años en las categorías inferiores del Atlético de Madrid. Un par de décadas después, con 24, no pudo cambiar su corazón rojiblanco por el escudo madridista. Tal vez fue el destino el que se lo impidió. El destino o la cabezonería de Louis Van Gaal, que al final se salió con la suya para retener en el United a De Gea.
Nacido en Madrid en 1990 pero criado en Illescas (Toledo), la vida de De Gea estuvo ligada a unos colores, el rojo y el blanco del Atlético. Con ese club firmó su primer contrato profesional siendo adolescente y con fortaleza y carácter logró hacerse con un hueco en el primer equipo.
Era el verano de 2009 y, con Sergio Asenjo y Roberto Jiménez recién fichados, el club madrileño planeaba ceder a De Gea, incorporado a la pretemporada del equipo que por aquel entonces entrenaba Abel Resino. La dirección deportiva le veía como tercer portero o con un destino a préstamo para sumar minutos.
Las Palmas y Numancia negociaron por él con el club rojiblanco. De Gea dijo no. "El club lo quería ceder y él vino a verme y me dijo: 'míster, yo no quiero irme, quiero quedarme porque creo que soy mejor que los que están'", recordó años después Abel Resino.
"Yo no le conocía, pero lo que dijo me gustó, porque no sonó a prepotente, al contrario, él lo dijo porque tenía mucha confianza en sí mismo. Por eso, le respondí: 'si tienes confianza en ti mismo, por mi parte no hay ningún problema, te quedas y punto. Es cuestión de que te hagas con la portería'", continúo Abel.
El 30 de septiembre de 2009, entre un cúmulo de circunstancias -Sergio Asenjo estaba en el Mundial sub'20 y Roberto Jiménez se lesionó en el minuto 26 del partido de Liga de Campeones frente al Oporto-, De Gea surgió en el primer equipo, con el que detuvo un penalti tres días después ante el Zaragoza y con el que, en enero, fue indiscutible ya con Quique Sánchez Flores como técnico.
No se movió del once en una temporada que devolvió al Atlético a las primeras páginas del fútbol europeo. Ganó la Liga Europa (2010) en la final contra el Fulham disputada en Hamburgo. Y después, al verano siguiente, la Supercopa de Europa contra el Inter, en la que detuvo un penalti. Entre ambas, perdió una final de la Copa del Rey.
Después de 84 partidos oficiales, en el verano de 2011 salió rumbo a Inglaterra, al Manchester United. En la Premier League ha llegado a convertirse en un guardameta de referencia. Aún así, tuvo unos meses de debilidad en su segunda temporada, en la que unos problemas dentales provocaron su presencia en el banquillo más de lo esperado.
Sin embargo, sus apariciones fueron fundamentales para que el United consiguiera el título de Liga al que también sumó dos Communitty Shield (2011 y 2013) y dos cursos más en los que el Manchester cayó en picado pese a sus grandes actuaciones: ocupó la séptima plaza (2013/14) fuera de Europa y la cuarta (con el técnico Louis Van Gaal el año pasado).
Con España, Iker Casillas, que le abrió las puertas para entrar en el Real Madrid, también se las sigue cerrando para ser titular en la selección. Tarde o temprano será el portero titular de Vicente del Bosque, pero tendrá que esperar, como esperó todo un verano para fichar por el Real Madrid.
Florentino Pérez no podrá adquirir gratis el año que viene a su portero preferido. Si lo quiere, tendrá que pagar por culpa de la firma que estampó De Gea este viernes en su nuevo contrato.
El sueño del presidente blanco, aquel que le iluminó una noche de verano, acabó. El guardameta de corazón rojiblanco pero con la mente puesta en el Real Madrid, se queda en Inglaterra. El verano acabará oficialmente el 22 de septiembre, pero hace tiempo que concluyó para De Gea.
