El piloto oficial de Skoda se benefició de los abandonos de Breen y Abring
El piloto finlandés Esapekka Lappi, a los mandos de un Skoda Fabia S2000, se adjudicó este fin de semana la victoria en el Rallye de Irlanda, la segunda en su cuenta particular en esta temporada, lo que le sirve para pasar a encabezar la clasificación provisional del campeonato europeo, el ERC, beneficiado por el prematuro abandono de Craig Breen.
Fue durante el primer tramo de la segunda etapa, disputada el sábado, cuando la rotura de radiador del coche de Craig Breen, la misma que sufría su compañero de marca, Kevin Abbring, el primer día, motivaba su abandono, y todo ello a pesar de ser sustituido en la última asistencia por precaución.
Con el abandono de Breen, Lappi se limitó a conservar una ventaja más que cómoda, cercana a los dos minutos respecto a Barrable y a su compañero de equipo, Sepp Wiegand, objetivo que cumplió a la perfección, lo que le permitió alcanzar su segunda victoria del año, junto a la de Letonia, con un margen más que holgado, alzándose con el liderato provisional del certamen con 29 puntos de ventaja respecto a un abatido Breen.
La segunda plaza del podio se decidía durante la disputa del penúltimo tramo, en el que Barrable perdía la pequeña diferencia que le separaba con Wiegand, de casi siete segundos, al salirse de carretera y hacer una excursión sin sufrir daños, pero con cinco segundos de retraso, un gran susto en el cuerpo y con tan sólo 15 km de la última especial para asaltar la segunda plaza, algo que no sucedió ante la gran defensa de Wiegand.
La próxima prueba será en Azores, totalmente sobre tierra, en cuatro semanas.
