Ayer se abrió una nueva edición de la mejor competición de clubes del mundo y lo hizo con la misma pasión y las mismas pinceladas de calidad que en años anteriores. La 'orejona' vuelve a entrar en juego.
Se abrió el telón en la Champions. La máxima competición del fútbol europeo y, tal vez, del fútbol mundial arrancó anoche con el mismo espectáculo de siempre y con un himno que nunca defrauda. Lo hace con una fase de grupos que será el preludio de una nueva lucha encarnizada por el cetro europeo.
El Real Madrid volverá a luchar por hacerse con su título fetiche, el Barcelona de Luis Enrique volverá a sacar sus mejores galas para conquistar su sexta corona y seguir ampliando su catálogo de títulos y el Atlético de Madrid peleará porque este sí sea su año tras acariciar la orejona con la punta de los dedos en la pasada campaña.
El City de Guardiola, el Bayern de Ancelotti, el Paris Saint Germain de Unai Emery o la Juventus serán los principales candidatos a romper la hegemonía española en la Champions. Miradas puestas sobre todo en Manchester para un equipo y una afición que anhela ser el club más importante del continente.
Pero no podemos olvidarnos de los secundarios y las sorpresas. Arsenal, Sevilla, Oporto, Tottenham o Borussia podrían deparar alguno de esos partidos o eliminatorias para recordar. Sus plantillas quizás no alcancen a los equipos mencionados anteriormente, pero tienen la calidad y las ganas suficientes para llegar muy lejos en la competición y, quien sabe, si levantar el título.
Habrá espacio para nuevas noches épicas, jugadas para guardar en la memoria y jugadores que presentarán sus credenciales para ser los nuevos ídolos de una competición que suele encumbrar a las grandes estrellas. Vuelve la competición europea y con ellas la tensión de las numerosas y fieles aficiones europeas. Alemania volverá a demostrar que tienen la más numerosa, Turquía la más apasionada, Inglaterra la más mágica y la española, que si alguna vez no falla es en las grandes noches de Champions.
